El pasado 11 de agosto se cumplieron dos años de que Rusia registrara la Sputnik-V, como la primera vacuna del mundo contra el Covid-19. En ese plano, de hecho trascendental, Nuevo Diario dialogó con la Dra. Marta Cohen, médica patóloga pediátrica que desde el Reino Unido realizó una reflexión sobre un hecho que cambió a la humanidad, y le devolvió la esperanza, con una vacuna contra un mal que en ese entonces era desconocido.
En tal sentido, la autora de “Un mundo en pandemia: lecciones y desafíos del coronavirus”, expresó: “La vacuna comenzó a ser aplicada el 3 de diciembre de 2020 en el Reino Unido. Y a partir de ahí fue un gran cambio porque sabíamos que teníamos una manera de controlar esta pandemia”, recordó la profesional. Asimismo comentó sobre el impacto social que generó este registro y aplicación de la vacuna: “El impacto social ha sido fantástico, porque la mortalidad ha disminuido, en el pico de la ola alta, siendo que hubo 2.000 muertos diarios en el Reino Unido. Y similares en otros países y con el virus Ómicron 950 por semana”.
La lucha continúa
En tanto, la Dra. Cohen fue tajante a la hora de saber que la pandemia aún está latente: “Con las vacunas, el distanciamiento social y las medidas sanitarias, podemos tener una vida de mejor calidad, pero esto no terminó porque esto se controlará cuando esté vacunado el 75% de la población mundial”, afirmó y remarcó: “No terminó la pandemia, tenemos que seguir cuidándonos”.
Calentamiento global
La médica patóloga hizo hincapié sobre una realidad actual: “Es importante tener en cuenta por el cambio climático y la deforestación, las pandemias van a ser seguramente de virus zoonóticos, porque el hábitat de los animales se está desplazando por el calentamiento global y la deforestación y eso producirá muchas enfermedades de transmisión de unos mamíferos a otros, de virus que aún no conocemos puesto que aún no hubo contacto con los seres humanos”.