Boca afrontará ante Racing los cuartos de final de la Libertadores con la intención de dar un paso más hacia la gran obsesión: la séptima copa. Uno de los elementos clave del plantel para lograrlo es Valentín Barco, el joven de 19 años que es la carta futbolística más valiosa de los últimos tiempos.

El lateral devenido en volante es una pieza de creación de fútbol ofensivo muy difícil de reemplazar en el equipo de Jorge Almirón y en el último duelo ante Nacional en la Bombonera se convirtió en figura excluyente. 

Pero el público xeneize, que está enamorada del Colo, se alarmó con la posibilidad cierta de que se concrete la venta del jugador al fútbol europeo. Ya hubo una oferta del Brighton de Inglaterra, pero los 9 millones de dólares por el 85% del pase no convencieron a la dirigencia.

Este jueves apareció otro pretendiente de peso: nada menos que Manchester City, que está dispuesto a poner más de lo que marca la cláusula de rescisión de 10 millones dólares. En total serían 14 millones porque pagaría lo que marca la denominada regla de protección que figura en el contrato del jugador y que se activa si una entidad del exterior pretende comprarlo cuando restan menos de 20 días para el cierre del mercado de pases.

Además, el comprador deberá hacerse cargo de los impuestos, lo que llevaría la cifra a 17 millones, de los cuales 14 serían limpios para Boca.

Ante este panorama, no queda más que la palabra del jugador para terminar de definir la situación. Y el deseo de Barco es jugar la Copa Libertadores con Boca y recién después emigrar. Ya lo había manifestado ante el ofrecimiento de Brighton que al final no prosperó.

Así las cosas, habrá que ver si Manchester City, que acaba de iniciar su rodaje en la Premier League, acepta adquirir a la joven figura y permitirle participar de lo que reste de la Copa con la casaca auriazul.