Con el objetivo de brindar respaldo financiero a los trabajadores y promover la estabilidad económica en el país, se han establecido medidas que benefician tanto al sector privado como al público. Estas iniciativas buscan aliviar la carga financiera de los empleados y contribuir al bienestar general de la sociedad.
Empleados del Sector Privado:
Los empleados del sector privado recibirán una suma fija de $60.000, que se distribuirá en dos cuotas mensuales. Esta suma no remunerativa y por única vez será absorbible por las paritarias, lo que significa que no impactará en futuras negociaciones salariales. Está dirigida a trabajadores con salarios netos de hasta $400.000 mensuales, con el propósito de ofrecer apoyo a quienes enfrentan desafíos económicos.
Para aliviar el costo de esta medida, el Estado asumirá la responsabilidad a través del pago a cuenta de contribuciones. Las Microempresas tendrán un 100% de descuento en sus contribuciones, mientras que las Pequeñas Empresas recibirán un 50% de descuento.
En total, alrededor de 5,5 millones de trabajadores serán beneficiados por esta medida, lo que demuestra el compromiso del gobierno en apoyar a la fuerza laboral y promover la estabilidad económica.
Empleados del Sector Público:
Los empleados del sector público también serán beneficiados con una suma fija de $60.000, distribuida en dos cuotas mensuales. Al igual que en el sector privado, esta suma no remunerativa y por única vez será absorbible por las paritarias. Está destinada a trabajadores con salarios netos de hasta $400.000 mensuales.
Esta medida refleja el compromiso del gobierno en brindar apoyo a los empleados del sector público y garantizar su bienestar económico en un momento desafiante.
En resumen, estas medidas de sumas fijas buscan aliviar la carga financiera de los trabajadores en ambos sectores y contribuir a la estabilidad económica del país. El gobierno busca promover el bienestar general de la sociedad y brindar apoyo a quienes más lo necesitan en este contexto.