Anoche, una desesperada mujer de 52 años acudió a sede de la Comisaría 41ª de Añatuya para informar sobre una dramática situación que afronta.

De acuerdo con lo que relató, tiene un hijo de 16 años que es adicto a las drogas y el jovencito tiene un amigo de apellido Junco (23) con el que suelen cometer delitos. La mujer agregó que ya cansada de no poder contener a su rebelde descendiente, dio su consentimiento a través de la Defensoría, a pedido de la madre del amigo de su hijo, para que este viva con ellos.

También añadió que el pasado domingo 12 del corriente, Junco, el amigo de su hijo, le robó un anafe de dos hornallas y la atacó a bofetdas en el rostro, razón por la cual ella lo denunció y la Fiscalía fijó una prohibición de acercamiento del agresor a la denunciante.

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Respecto al motivo por el cual anoche fue a la comisaría, explicó que una hora antes, el denunciado se presentó en su casa para reclamarle que su descendiente le había robado plata a su abuela. La madre le respondió que ellos mismos le dieron alojamiento a sabiendas de su adicción y de que comete hechos ilícitos.

La fiscal Alejandra Sobrero dispuso que se identifique al agresor y se le notifiquen nuevamente medidas de prohibición de acercamiento a la mujer, a quien además se le activó el botón antipánico en su teléfono celular. De todos modos, el delincuente fue apresado anoche por los otros robos que se le endilgan.