Un jubilado de 65 años salió antenoche, alrededor de las 21, de su domicilio de la calle General Taboada del barrio Pueblo Nuevo de Suncho Corral. Lo hizo en forma circunstancial, para realizar unos trámites. Una hora y media después, a las 22.30, recibió un llamado telefónico de su esposa, quien le dio la ingrata noticia de que habían ingresado a robar en ese inmueble donde él vive solo porque su esposa e hijos residen en otro sector de la ciudad cabecera del departamento Juan Felipe Ibarra.
El hombre, de apellido Rodríguez, comprobó que sus pertenencias estaban desordenadas y dispersas por el piso, signo evidente de la “visita” de delincuentes durante su ausencia.
El damnificado realizó un relevamiento de sus pertenencias y lo primero que hizo fue dirigirse hasta un placard donde guardaba sus ahorros para afrontar cualquier contingencia de su familia. Buscó en uno de los cajones, pero no encontró la bolsa con plata. Revisó otros sectores y finalmente se convenció de que le habían robado 300 mil pesos que tenía en tres fajos de $ 100 mil. También descubrió que le habían sustraído un revólver, calibre 38 milímetros, que le habían regalado recientemente como una reliquia.
El dinero y el arma de fuego fue lo único que se llevaron. No obstante, los ladrones habían preparado para llevarse un televisor y un kit de herramientas para pintar y pulverizar. De acuerdo con las primeras pericias, los autores del robo violentaron la ventana del costado de la propiedad.
La denuncia fue realizada en la Comisaría Comunitaria Nº 28 y se dio intervención a la Dra. Celia Mussi, representante de la Unidad Fiscal Capital, quien ordenó que se realizara el procedimiento de rigor y se diera intervención a la Sección Robos y Hurtos para que realizara averiguaciones.