Un productor de Selva fue despertado a la madrugada por un vecino, quien le informó que presuntos cuatreros estaban carneando animales vacunos en su campo ubicado a 80 kilómetros de la ciudad cabecera del departamento Rivadavia. El damnificado, de 53 años, se trasladó inmediatamente a su propiedad y esperó en el portón. Posteriormente, se aproximó una camioneta y el productor ganadero la interceptó. El vehículo era conducido por un carnicero de la localidad de Fortín Inca, departamento Belgrano, quien le habría manifestado que un sujeto de apellido Rodríguez le había vendido los animales. Efectivamente, en la caja del rodado transportaba cuatro vacas de alrededor de 120 kilos cada uno. El productor de Selva comprobó que dos de ellas le pertenecían y las restantes serían de otro de los productores de la zona. Seguidamente, el carnicero regresó hacia el interior de la propiedad de 6 mil hectáreas y el damnificado se trasladó hasta la Comisaría Comunitaria Nº 21 de Bandera, donde realizó la denuncia.
Orden judicial
El hecho fue informado al Dr. Guillermo Farías, representante de la Unidad Fiscal Añatuya, quien ordenó la aprehensión del carnicero y de Rodríguez, por el delito de abigeato. Posteriormente, se iniciaron las averiguaciones, oportunidad en la que personal policial advirtió que el carnicero estaba faenando un animal vacuno en el fondo de su domicilio de Fortín Inca. El hecho fue informado al fiscal Farías, quien solicitó la orden de allanamiento a la jueza de Control y Garantías, Dra. Ana María González Ruiz, que autorizó el ingreso al inmueble del comerciante.
Los uniformados irrumpieron en el domicilio y secuestraron una camioneta, una cadena y una soga desde un árbol, parte del cuero de una vaca y 30 kilos de carne que aún había en la carnicería. Asimismo, aprehendieron al sospechoso, de apellido Guzmán (48 años), más conocido como “Pichi”, acusado de abigeato.
Interceptan a cliente santafesino con 11 kilos de asado
Durante los procedimientos, los policías tomaron conocimiento que momentos antes se había retirado un cliente santafesino de la carnicería.
En consecuencia, personal del puesto caminero de Fortín Inca interceptó un automóvil en el que se movilizaba un vecino de la localidad de Logroños, quien reconoció que había comprado 11 kilos de asado al imputado, por lo que fue secuestrado.
Por orden del fiscal Farías, toda la carne incautada fue entregada al denunciante y se profundiza la investigación.