Una remisera de 39 años realizaba recorridos por la zona sur de la ciudad Capital en busca de pasajeros, hasta que una pareja le hizo señas en avenida Belgrano y Lamadrid del barrio Ramón Carrillo, en inmediaciones del hospital Regional. La mujer detuvo la marcha y ascendieron los pasajeros al auto de alquiler, tras lo cual solicitaron ser trasladados hasta una empresa de lácteos de la calle Besares de La Banda.

El trayecto fue ameno durante la conversación entre los tres ocupantes del rodado afectado a una empresa de remises de la zona oeste capitalina.

En el citado lugar, descendió el hombre y la mujer permaneció en el asiento trasero. El sujeto habló con otro individuo y regresó momentos después. Al ascender al vehículo, le pidió a la remisera que regresara a la Capital.

En este sentido, los pasajeros indicaron que descenderían por un momento en Únzaga y Rivadavia para cambiarse de ropa en su departamento y seguirían viaje en el auto de alquiler hacia otro sector de la "Madre de Ciudades".

Sin embargo, al llegar al segundo destino y con una abultada suma de dinero en el visor de la tickera, los pasajeros descendieron, pero no ingresaron al edificio. Hicieron unos pocos pasos y emprendieron la fuga a la carrera por Únzaga hacia el sur. Tras llegar a la calle Jujuy, la conductora los perdió de vista y llamó a su esposo, quien también estaba trabajando como remisero en otro auto.

La mujer le brindó características físicas y de vestimenta de los sospechosos y ambos realizaron un rastrillaje. Momentos después, el hombre ubicó a la pareja en Ejército Argentino, entre Rivadavia y Jujuy, donde los sospechosos habrían manifestado que no tenían plata para pagar el viaje.

El hecho provocó la llegada del personal de la Comisaría Nº 1 que se hizo cargo de los acusados, de apellidos Curi y Arias, quienes quedaron aprehendidos por orden de la Dra. Victoria Sottini, representante de la Unidad Fiscal Capital.

La remisera se presentó en la citada dependencia policial del barrio Centro y realizó la denuncia por estafa.