Vicente Bokalic Iglic, arzobispo de Santiago del Estero y primado de Argentina, es uno de los cardenales designados a elegir al nuevo Papa, en el cónclave que comenzará el próximo miércoles 7 de mayo.

"Cuando el Papa me mandó a Santiago, lo hice con todo el amor posible", recordó Bokalic Iglic, en comunicación con C5N, desde Ciudad del Vaticano, Italia. "Él sabía que era misionero, que anduve por muchos lugares de nuestra patria. Me pidió que fuera a Santiago del Estero y con mucha alegría acepté ese desafío", agregó.

El nacido en Lanús, Buenos Aires, fue convertido en cardenal en diciembre de 2024. "En este momento, el 80% de los que vamos a elegir al nuevo Papa somos cardenales que fuimos elegidos por Francisco, así que somos todos nuevos. Él tuvo esta visión de una Iglesia universal", revalorizó.

El arzobispo, consultado por los atributos del nuevo Sumo Pontífice, consideró: "El próximo Papa tiene que tener las características de Francisco: de mucha apertura, de cercanía, de una iglesia que sale al encuentro de la gente, que abraza a los marginados, que esté atenta a lo que pasa en el mundo y el legado de la paz. (…) Nuestra esperanza es que este rumbo que ha marcado Francisco se profundice. Cada uno pone su impronta, pero él ha dejado una huella profunda. Ha abierto la Iglesia para que todos podamos escucharnos, aceptando lo diverso".

El primado, respecto a la convivencia con los demás cardenales, comentó que se vive un clima de "tristeza", porque " todavía seguimos de duelo, pero con respeto, cercanía, apertura y expectativas de saber que alguien lo tiene que reemplazar (al Papa)".

Monseñor, en ese sentido, recordó su última conversación con Francisco: "Fue en mi nombramiento. Siempre con amabilidad, también estoy agradecido de haberme sumado a este acompañamiento".