El Barcelona se proclamó campeón de la Copa del Rey 2025, luego de ganarle 3-2 en la final al Real Madrid. Pedri rompió el cero para los blaugranas, Mbappé y Tchouamení lo dieron vuelta y a 5 minutos de los 90, Ferran Torres igualó el partido. A instantes de que la historia se definiera en los penales, Jules Koundé le dio el triunfo al club culé que levantó el trofeo por vez número 33.
El primer tiempo fue un monólogo de los culés. Con una posesión del 63%, los dirigidos por Hansi Flick se adueñaron del partido mediante su juego, sus pases y su ambición. Por el otro lado, la Casa Blanca estuvo perdida. Tan solo un disparo -que no fue al arco- contra nueve del club catalán.
A los 28 minutos, se rompió el cero en Sevilla. Lamine Yamal desbordó por la derecha y, tras juntar a tres rivales, pasó la pelota hacia atrás para Pedri González, quien desde fuera del área, lanzó un misil que se incrustó de lleno en el ángulo derecho de Thibaut Courtois.
El conjunto blaugrana tuvo más chances de gol. El Merengue evitó tantos gracias a su arquero, aunque también tuvo ayuda de los postes, cuando Dani Olmo casi convierte un gol olímpico que fue denegado por el palo.
El ingreso de Mbappé en el complemento cambió la dinámica por completo. Los dirigidos por Carlo Ancelotti, con confianza y fútbol, generaron mucho peligro al arco rival. Vinicius tuvo reiteradas situaciones para poner el primero, que fueron evitadas por el guardameta polaco Wojciech Szczęsny.
La estrella gala, campeona del mundo en 2018, fue determinante. A los 25 minutos, Frenkie De Jong lo sujetó en un contraataque cerca del área, lo que resultó en un tiro libre. Del mismo se encargó Mbappé, quien realizó su primer gol de falta en su carrera, al palo del arquero.
El envión anímico del Merengue revoleó el tablero. Siete minutos después del empate, Arda Guler lanzó un córner que asistió a Aurélien Tchouamení quien, de cabeza, dio vuelta el marcador.
Pese a la superioridad blanca, a los blaugranas aún les quedaba tinta en el tintero. A 5´ del final, Lamine Yamal asistió a Ferran Torres, que amagó a Courtois y, con el arco libre, equiparó el partido.
El suspenso hizo presencia en La Cartuja. En la última jugada, el juez, Juan Martínez Munuera, cobró un penal a favor del Barcelona tras una falta de Raúl Asencio sobre Raphinha. Más tarde, el VAR llamó al colegiado, quien rectificó y corrigió su decisión inicial. Tras este suceso, terminaron los 90 minutos y el encuentro avanzó al tiempo extra.