A patadas, un sujeto logró derribar a su expareja, que levantaba la ropa que le había tirado en la calle y luego le propinó una brutal paliza. La víctima, a la que le diagnosticaron lesiones curables en diez días, lo denunció.

El hecho de violencia doméstica se suscitó anteayer, a la hora 0, cuando una jovencita de apenas 18 años residente en el barrio Belén de la Capital se presentó en la casa de su expareja para buscar al hijo que tienen en común. Se trata de un niño de 1 año.

Apenas llegó, el sujeto la recibió con insultos y agresiones verbales. Para evitar la confrontación, la joven le dijo que “iba a llevarse a su hijo”, por lo que el denunciado reaccionó de manera violenta.

Le arrojó encima un bolso que contenía las pertenencias de la víctima, por lo que la ropa de la mujer quedó esparcida en el suelo. De inmediato, la joven comenzó a juntar sus pertenencias, lo que fue aprovechado por el sujeto para agredirla físicamente.

Le propinó una patada en la espalda, por lo que la víctima cayó al suelo. El sujeto continuó propinándole puntapiés y la amenazó de muerte. Luego, le entregó el menor y la víctima se retiró del lugar.

Tras la denuncia penal por el supuesto delito de lesiones, en el caso se dio intervención a la Fiscalía de Capital, que dispuso que la mujer sea examinada por el médico de Sanidad Policial, quien le diagnosticó lesiones curables en diez días.

Mientras, se dispuso la inmediata investigación con el fin de aprehender al sujeto denunciado.