Sandra Priore recibió un fuerte grito del exterior sobre los rumores de infidelidad de su marido con una escort, y los dichos podrían desestabilizarla dentro de Gran Hermano (Telefe).
Luego del programa del lunes 7 de abril, donde Claudio "Papucho" Di Lorenzo tuvo su oportunidad de hablar con los analistas tras ser eliminado, se escuchó un grito desde las cámaras de DIRECTV DGO para la participante donde dijeron: "Sandra, tu marido te cag* con una prostituta".
En ese momento, Sandra se encontraba fumando un cigarrillo en el patio de la casa, mientras que Lourdes, Eugenia, Juan Pablo, Ulises, Catalina, Chiara y Gabriela se encontraban a sus alrededores.
"Ella es una dama de compañía, ella es escort. "Es Delfina, su nueva amante, su nuevo vínculo", detalló Ochoa, mientras mostraban al aire el video donde se lo ve a Lucas entrando a la casa de la mujer.
"Qué turra, Delfina, cómo lo graba al hombre", tiró Yanina Latorre. "Lo prendió fuego", añadió Ángel de Brito. "A nada de viuda negra", se escuchó de Julieta Argenta, mientras el resto de los integrantes señalaba la cantidad de gente que había.
Sorprendida, Laura Ubfal destacó: "Hablo todos los días con él, en el streaming. "Va siempre a la tribuna", aseguró la periodista. "Qué atrevido y ella qué turra", apuntó Yanina Latorre.
Pepe mostró un chat donde Lucas, con la foto que lo muestra junto a Sandra en su perfil, se presenta ante la mujer diciéndole que había visto su anuncio en el sitio "Skokka" y en "Anthoo", y que quería una cita con ella.
Sandra tiene 50 años; es una mujer pescadora oriunda de La Plata, en la provincia de Buenos Aires. Al entrar al reality de Telefe, anunció que no entra a la casa para “levantarse alguien”, pero que no sabía lo que podía llegar a pasar. Se definió a sí misma como “viajera incansable” y reveló que disfruta de navegar. Vive en La Plata, con su marido y su perro.
Lucas, el marido de Sandra, entró a la casa de Gran Hermano con un ramo de flores y un pez en la prueba del congelado. Ella se emocionó al recibir la visita y fue una de las pocas veces que dejó ver su sensibilidad.