Este miércoles 7 de mayo inició el cónclave, el proceso histórico mediante el cual se elige al sucesor del fallecido papa Francisco. Los 133 cardenales con derecho a voto se reunieron en la Capilla Sixtina del Vaticano y se pronunció el tradicional Extra omnes (fuera todos) para proceder al cierre de las puertas.
Tras más de tres horas de votación, finalmente se conoció la primera fumata -negra- lo que indica que no hubo acuerdo entre los purpurados en lo que respecta al próximo Papa.
El cónclave debe comenzar entre 15 y 20 días después de que la silla papal quede legalmente vacante, según lo indica la constitución apostólica escrita por el papa Juan Pablo II en 1996 y actualizada por Benedicto XVI en 2013. Así lo hicieron las autoridades del Vaticano, en una primera jornada donde la chimenea despidió humo negro, informando que, en la primera votación, no hubo decisión sobre el nuevo Papa.