El Vaticano ha instado a los miles de visitantes que se acercan a rendir homenaje al difunto papa Francisco a mostrar respeto y guardar sus teléfonos móviles mientras pasan frente al ataúd del pontífice. Las autoridades vaticanas han sido claras en su solicitud: no se permiten selfies ni fotografías con el cuerpo del Papa durante su velatorio en la Basílica de San Pedro.

Hasta el jueves, casi 130.000 personas han presentado sus respetos al Papa Francisco, muchas de las cuales han hecho largas filas para poder acercarse al féretro, que permanece abierto, para rendir homenaje al líder de la Iglesia Católica. Sin embargo, mientras muchos dolientes se inclinaban en señal de oración y respeto, otros no dudaron en levantar sus teléfonos para tomar fotos o incluso para posar para selfies, un gesto que ha provocado controversia.

Imágenes grabadas dentro de la basílica por CNN mostraron cómo algunos fieles se detenían frente al ataúd para capturar momentos con el difunto Papa Francisco. Los videos, que rápidamente se viralizaron en plataformas como TikTok, fueron acompañados de reacciones de desaprobación. “Qué irrespetuoso”, comentaron varios usuarios, recibiendo miles de "me gusta".

Ante esta situación, el Vaticano emitió una directiva el jueves pidiendo a los visitantes que guardaran sus teléfonos y no tomaran fotos al pasar junto al féretro. La medida fue tomada después de que el uso indiscriminado de teléfonos móviles se hiciera evidente el día anterior, lo que generó críticas por la falta de control adecuado.

La política del Vaticano en estos casos es clara. Desde 1996, está prohibido fotografiar o filmar al pontífice en su lecho de muerte o después de su fallecimiento, salvo cuando el camarlengo, la autoridad interina, lo autorice con fines documentales. Esta normativa busca preservar el decoro y el respeto durante un momento tan solemne para la Iglesia y sus fieles.

El velatorio del Papa Francisco continuará hasta las 6:00 p.m. (hora local) de este viernes, momento en el que se cerrará la fila para acceder a la Basílica de San Pedro. A partir del sábado, el Papa será enterrado en la Iglesia de Santa María la Mayor, tras una ceremonia en la que participarán numerosos líderes políticos, religiosos, miembros de la realeza y figuras públicas.

El funeral, que se celebrará en la Plaza de San Pedro, será una solemne ceremonia al aire libre, antes de una procesión que recorrerá algunos de los principales puntos históricos de Roma, como el Foro Romano y el Coliseo, para finalmente llegar a la iglesia donde descansará el cuerpo del Papa.

El Vaticano hace un llamado a todos los fieles y visitantes a mantener el respeto durante este significativo momento, recordando que el Papa Francisco, con su legado de humildad y diálogo, merece un adiós digno de su vida y su labor al frente de la Iglesia Católica.