Javier Milei, presidente de la Nación, acusó el jueves pasado que “la ideología de género constituye, lisa y llanamente, abuso infantil. ¡Son pedófilos!”, en el marco del Foro Económico Mundial de Davos, en Suiza.

El equipo de Nuevo Diario se comunicó con Rubí Gómez, delegada provincial de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (Attta), para conocer su opinión al respecto.

“Evidentemente, el presidente Javier Milei no entiende la frase: ‘Tus derechos terminan donde empiezan los del otro’”, señaló.

Gómez, sobre este último punto, explicó: “El límite de los derechos y las libertades individuales establecen que, si bien todos tenemos derechos y libertades garantizados por la Ley, deben ejercerse de manera que no afecten o limiten los derechos y las libertades del otro”.

La delegada, en ese sentido, entendió que se trató de un “ataque misógino, homofóbico y transfóbico”.

La licenciada en Gestión Educativa entendió que “la histórica lucha” y el “protagonismo del colectivo LGBT” están “desestabilizando” a Milei.

“Acá no se trata de una minoría, como todos piensan. Se trata de disminuir los derechos de una población que está ligada a muchas vulnerabilidades. Las personas trans estamos siempre el foco de la tormenta”, lamentó.

“El Estado es quien debe dar respuesta por su ausencia histórica”

Desde el Gobierno de la Nación presentarán Igualdad ante la Ley, un proyecto con el que buscarán eliminar todo tipo de distinción legal que beneficie a los feminismos, el colectivo LGBT y las personas con discapacidad.

De acuerdo a Tiempo Argentino, “una alta fuente del oficialismo” reconoció que el plan tiene como principal objetivo eliminar las leyes de “discriminación selectiva”. “El Estado no puede hacerse cargo de las necesidades de cada uno de estos sectores. Además, ¿quién determina qué es una minoría”, expresó.

Gómez, sobre este punto, refutó: “¡Claro que debe! El Estado es quien debe dar respuesta por su ausencia histórica: es fácil querer hacer Patria o hablar de libertades desentendiéndose de las verdaderas necesidades de las personas”.

La delegada, por último, manifestó que la Ley de Identidad de Género “no solo vino para quedarse, sino para hacerle frente a toda expresión biologicista y sexista”.