Hablar de los Abdala es hablar de la historia del tiro al vuelo y en especial del Club de Cazadores de Santiago del Estero (en la actualidad Centro Olímpico de Tiro Deportivo). La familia Abdala ya tiene la cuarta generación en el Club de Cazadores. En diálogo exclusivo con Nuevo Diario, Llamil Abdala dio detalles de una historia que comenzó en 1960. "Ese año mi abuelo (don Llamil) se inició en el Club de Cazadores, y con él mi padre (Víctor 'Nene' Llamil) y mi tío Orlando 'Bocha'". En el año 1982, con 10 años, me inicié en el tiro deportivo. Y ahora el que continúa con ese legado y pasión es mi hijo Tarek (14 años)".

Sobre el tiro deportivo, Llamil Abdala afirmó: "El tiro deportivo es una disciplina de moderado esfuerzo físico, pero de alta concentración. Además, te va llevando e introduciendo a una actividad deportiva y social. Hay reglas de comportamiento y vinculación con los demás tiradores. También se caracteriza por ser un deporte de caballeros y de mucho respeto". Asimismo, destacó el nivel de enseñanza a los niños e iniciados sobre la práctica del tiro, el manejo y el respeto que se debe tener a la escopeta o cualquier otra arma de fuego".

"Me encanta el tiro deportivo. Me inicié en 2020, tuve un parate por la pandemia y hace un año y medio que volví. Es muy lindo, desde niño acompaño a mi viejo, que me enseña un montón, además de tirar, a cómo armar, desarmar y limpiar la escopeta", contó Tarek Abdala.