El clima de efervescencia que se vivía en el PRO la semana pasada con la posible división del peronismo bonaerense cambió notablemente. La posibilidad de que el PJ finalmente no vaya dividido, sumado a los improperios del presidente Javier Milei hacia los Macri, puso en pausa la posibilidad de un acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires. Tanto voceros del ala autonomista como el propio Macri relativizaron las negociaciones que hubo hasta ahora y las resumieron en un par de fotos con Karina Milei que no fueron más allá de eso. El sector acuerdista todavía guarda esperanzas de que las negociaciones se retomen una vez que hayan terminado las elecciones porteñas.
Hay una realidad política: la posible división entre Cristina Fernández de Kirchner y Axel Kicillof de la semana pasada agitó el hormiguero y generó una aceleración de las negociaciones que venían dándose entre LLA y el PRO bonaerense. De hecho, en plena semana hubo una nueva foto de Karina Milei con Diego Santilli y Cristian Ritondo. La tregua entre CFK y Kicillof y el camino que aleja la ruptura, de la misma forma, enfría los incentivos para acordar.
Antes era acordar para ganarle a un PJ dividido. Sin división del peronismo, es acordar para no quedar tan atrás (siempre según las encuestas). Pero el freno a las negociaciones del PRO lo dieron las palabras del presidente Milei, que -por un lado- aseguró que la alianza electoral en provincia era un hecho y, por el otro, atacó como nunca a los Macri, Mauricio y Jorge, a los que trató de traidores, culpó por la ausencia de un frente electoral en la Ciudad, entre otras cosas lindas.
Desmentida calabresa
Ante esto, el ex presidente Macri se ocupó de desmentir a Milei en su afirmación de que había ya una alianza electoral en provincia de Buenos Aires entre el PRO y LLA. "No está cerrada", aclaró. “Lamento porque le dicen al Presidente algo que no está sucediendo”, dijo, como quien no quiere la cosa. Su declaración tuvo un doble veneno: culpó a su entorno de informarle mal a Milei el estado de las negociaciones y, a la vez, lo dejó a él como una persona que vive fuera de la realidad política de su propio partido y da por hechas cosas que no son.
“Ha habido dos fotos y mucha conversación en los diarios”, resumió Macri lo que fueron los encuentros con Karina Milei. “Hasta ahora no he escuchado, y menos a la hermana y menos al triángulo de hierro o al que sea, decir 'Queremos un acuerdo con el PRO en la provincia'”, remarcó el ex presidente.
Macri apunta no solo a lo que no se dijo, sino a lo que dejan transcender en off the record después de cada una de esas fotos: que no habrá realmente alianza con el PRO, sino que se llevará a sus dirigentes más valiosos para su espacio. También: que no tendrán ninguna cabeza de lista y recibirán los lugares que la hermanísima disponga.
Por eso, Macri dijo: "Todavía ni siquiera han aceptado que esto es un acuerdo entre partidos y tiene que haber un frente".
Macri también se ocupó de contestar a las largas diatribas de Milei contra su primo, en las cuales culpó al jefe de Gobierno por la ausencia de un acuerdo electoral en la Ciudad de Buenos Aires."Él dijo hoy que por culpa de que la Ciudad adelantó la elección no hubo un acuerdo en la Ciudad. La Ciudad adelantó la elección el 27 de diciembre del año pasado; el 8 de enero el Presidente dijo públicamente: 'Quiero un acuerdo por el todo' y el 9 de enero yo saqué un comunicado diciendo 'javier estamos listos'", hizo la cronología Macri.
No sin amargura, el ex presidente recordó que incluso designó públicamente a cinco dirigentes para que llevaran a cabo las negociaciones y, a continuación, le clavaron el visto. "Silencio de radio. En off en la Rosada decían 'no tenemos apuro, no tenemos interés'", recordó Macri el desaire que recibió a su propuesta pública. Sobre la negociación bonaerense, Macri advirtió: "Con la mesa ejecutiva del PRO delegamos en Ritondo y Santilli que vayan a sentarse a conversar, para ver cómo en cada distrito si unimos fuerzas". Optó por no decir que esas negociaciones están freezadas.
La vocera porteña Laura Alonso profundizó en esta línea y recordó que ya hubo siete cierres de listas donde podrían haber armado un frente: "No hay ningún acuerdo. Hay dos fotos, con el antecedente de las siete provincias (en las que no acordaron). La Libertad Avanza de Karina Milei dijo no al PRO", recordó Alonso. En particular, sobre la pronvicia de Buenos Aires, advirtió: "Se tomaron un café y hay dos fotos, pero no hay ningún acuerdo, por eso nos preocupa que al Presidente lo informen mal".
Y le recordó a Milei que está siendo ingrato: "El año pasado el PRO en el Congreso no solo apoyó proyectos fundamentales que dieron gobernabilidad al Gobierno Nacional sino que mejoró los dictámenes, hizo modificaciones adecuadas y las negoció con otros bloques, y esa es la intención con la que nos acercamos a la política".
Reunión suspendida
En ese contexto de freno a las negociaciones, llamó la atención a varios que Ritondo suspendiera una reunión del PRO bonaerense en la que iba a reunir a intendentes y legisladores provinciales para debatir la forma de un acuerdo con LLA. Si bien muchos interpretaron que era parte de las consecuencias del enfriamiento de las negociaciones, en el entorno del presidente del PRO bonaerense dieron otra explicación a este diario: "La reunión era a las 12. A las 15, nuestros senadores tenían que estar en provincia por la suspensión de las PASO. No tenía sentido debatir antes de eso, porque sin las PASO te cambia todo el escenario. Por eso, lo pasamos para la semana que viene".
El sector acuerdista del PRO no se da por vencido, pese a lo adverso del momento. Consideran que sin las PASO bonaerenses, habrá más tiempo para negociar. Algunos plantean que lo mejor será esperar a que pasen las elecciones porteñas, para ver si baja allí el nivel de virulencia entre Macri y Milei. Sobre todo si les gana el peronismo por ir divididos, lo cual podría constituir una dura lección para ambos, piensan los optimistas.
Si logran, en algún momento, empezar negociaciones reales para un frente, el otro problema será, claro, acordar los lugares en las listas. No parece haber mucho interés por parte de Karina Milei por ofrecerles lugares expectantes. Macri espera que la negociación sea de igual a igual y hay dirigentes acuerdistas que están planteando que eso no va a ser posible porque la marca de LLA mide más que el PRO. Pero para eso falta. Por ahora, las negociaciones fueron al freezer.
Con información de Página 12