Luisa Paz, exdelegada provincial del Inadi, se refirió al cierre del organismo que tenía sede en la ciudad Capital y dejó sin trabajo a dos personas: “Es una pérdida enorme”, lamentó, en diálogo con el equipo de Nuevo Diario.
“El Inadi ha sido creado, justamente, para dar respuesta desde el Estado a sectores vulnerables de la sociedad que necesitaban, necesitan y, seguramente, van a seguir necesitando apoyo y acompañamiento”, indicó Paz.
La exdelegada acusó que “gran parte de la sociedad” desconoce el alcance que tiene el organismo. “Solo se guían de uno o dos casos en particular, pero todas las sociedades vulnerables siempre han sido acompañadas con diferentes acciones e instancias hasta lograr que determinadas situaciones cambien”.
Cintia Cravero, quien ocupaba el cargo de asesora legal del Inadi, precisó que, “de los 400 empleados que había en todo el país, 170 estábamos en planta transitoria y se renovaba cada seis meses, a la espera de la captura de un concurso para poder pasar a planta permanente”.
“Tomaron la decisión de no continuar con la planta transitoria, basado en la Ley de Bases. Ese es el fundamento principal”, agregó Cravero.
Paz remarcó que “nos quedamos sin una herramienta fundamental, que es la sensibilización”: “Hoy estamos ante la posibilidad de que cualquier persona que se crea superior o piense que tiene la capacidad de hacer daño a otra lo pueda hacer”, advirtió.
La entrevistada, por último, reiteró: “El rol del Inadi era poder acercar avances en materia de derechos a toda la sociedad”.