Un hombre casado de 42 años de la ciudad de La Banda ingresó a las redes sociales con el objetivo de encontrar una mujer para mantener un encuentro íntimo y pagar por el servicio. Luego de observar los perfiles de varias trabajadoras sexuales, se "enganchó" con una de ellas. Iniciaron una conversación por mensajes de texto sobre los distintos servicios íntimos y los precios de cada uno de ellos. Finalmente, el bandeño y la trabajadora sexual llegaron a un acuerdo económico y convinieron encontrarse en la zona sur de la ciudad Capital.

El encuentro se produjo alrededor de las seis de la tarde de anteayer. Sin embargo, al llegar al lugar, el hombre advirtió que la prostituta —quien también es estudiante universitaria— no estaba en buenas condiciones físicas para brindar "correctamente" el servicio sexual que habían pactado. El cliente observó que la joven estaba bajo efectos evidentes de sustancias prohibidas y decidió rechazar el servicio.

No obstante, la universitaria le exigió al hombre que igualmente le pagara todo el servicio que habían convenido por redes sociales, aunque el cliente se negó. Se inició una discusión que fue subiendo de tono en la vía pública, hasta que el fuerte enfrentamiento verbal llamó la atención de automovilistas y peatones.

El incidente callejero generó la presencia policial para restaurar el orden y ambos protagonistas terminaron en la sede de la Comisaría Comunitaria Nº 51.

Durante el procedimiento de rigor, los uniformados comprobaron que la trabajadora sexual tenía debajo de la funda protectora del teléfono celular tres envoltorios con una sustancia pulverulenta. Las autoridades solicitaron la presencia del personal de la Dirección General de Drogas Peligrosas, que comprobó que se trataba de cocaína. El fiscal José Piña, representante de la Unidad de Lucha contra el Narcotráfico, ordenó el secuestro del estupefaciente.

Se dictó una medida de prohibición de acercamiento.