El párroco de Catedral Basílica en Santiago del Estero, Mario Rolando Tenti, será uno de los que acompañe en Roma al arzobispo Vicente Bokalic en su nombramiento como Cardenal el próximo fin de semana. Viajan hoy a Buenos Aires y mañana emprenden vuelo a Roma, estarían llegando el miércoles.
En diálogo exclusivo con el Multimedio, Tenti dijo: “El sábado 7 de diciembre es el Consistorio, donde el Papa se reúne con otros cardenales y donde va a nombrar a estos 21 nuevos cardenales para la iglesia, entre ellos nuestro arzobispo Bokalic. Que va a ser el único argentino de los nuevos cardenales. Un orgullo para él, a pesar de que sobre todo es un servicio. Tiene que ver con una misión y un servicio que se le encomienda, que en este caso le confía la iglesia para que cumpla tal rol. Y habla también de la confianza que le tiene el Papa Francisco a monseñor Vicente Bokalic”.
“Lo ha tenido como obispo auxiliar cuando él era arzobispo de Buenos Aires, por tanto, lo conoce. Un poco lo está reconociendo a él como pastor y a la vez está reconociendo la Diócesis de Santiago del Estero. Porque está nombrando un cardenal para la Diócesis primada del país, que tiene sede desde hace unos meses en Santiago del Estero”, planteó.
A su vez, el párroco siguió: “Un orgullo para nosotros como iglesia santiagueña y primera vez que vamos a tener un cardenal en nuestra Diócesis. Es una gran responsabilidad también para monseñor Bokalic”.
“Los cardenales son los que ayudan al Papa en la función de manejar todas las oficinas del Vaticano y los distintos dicasterios, congregaciones. Son un poco las manos derechas de las que se vale el Papa para el gobierno de la Iglesia. Y son los que van a elegir el día de mañana y a la vez pueden ser candidatos a sumo pontífice”, subrayó.
Acerca del protagonismo que viene teniendo Santiago del Estero, indicó: “Nosotros sentimos, obviamente, que el Papa Francisco de alguna manera tiene una cierta predilección. Nos ha regalado la canonización de Mama Antula, que es santiagueña; luego, el traslado de la sede primada a esta ciudad; y ahora el regalo del cardenalato de monseñor Vicente. Nos falta el cuarto regalo que sería su visita a Santiago, que todos estamos esperando”.
Por último, brindó una reflexión de la situación actual del país, de la región, teniendo en cuenta fechas importantes para la comunidad cristiana como el 8 y el 24 de diciembre. “En lo social, indudablemente ha sido un año duro. Todos sabemos y vemos cuál es la realidad de la Argentina hoy, con un nuevo gobierno. Las decisiones de ello, que en algunos sectores ha caído bien y en otros no tanto; También, la inflación que ha lastimado los bolsillos de la gente; mucha gente que ha quedado sin trabajo. El deseo de todos es que le vaya bien a la Argentina. Ojalá que podamos salir de toda esta crisis de pobreza”.
“Y ojalá que también se terminen las agresiones, empezando por el mismo presidente. Uno puede estar o no de acuerdo con el gobierno, lo que no podemos aceptar es el maltrato, la grosería, que no le corresponde a un presidente. Y no es un ejemplo en ese sentido. Todos necesitamos que la Argentina pueda salir adelante”, agregó.