El partido fue muy intenso, desde el principio hasta el final. Manchester City, obligado a ganar para alcanzar a Arsenal en la cima del campeonato, tomó la iniciativa en el arranque y se puso en ventaja gracias a un muy buen gol de Kevin De Bruyne. El belga aprovechó un grosero error en la salida de los Gunners y definió por encima del arquero Aaron Ramsdale.