Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
El Mundo #Femicidio

Un joven casado era el amante de su jefa: la ahorcó cuando se enteró que estaba embarazada

Se trata de un sujeto de 28 años, mientras que la víctima tenía 32. Cuando se dio cuenta que aún estaba viva la apuñaló en el cuello. El informe.

El técnico informático Gabriel Henrique Santos Masioli, de 28 años, fue detenido el viernes pasado en Rondônia, Brasil, por el delito de femicidio de su amante, que era su jefa en una empresa.

 

El hombre es sospechoso de asesinar a la gerente administrativa Antonieli Nunes Martins, de 32 años, quien presuntamente era su amante.

 

Según la policía, el joven estaba casado, y confesó que la mató tras descubrir que la víctima estaba embarazada de él.

 

El sospechoso ahorcó a Antonieli el jueves pasado y cuando se dio cuenta de que la víctima aún estaba viva, la apuñaló en el cuello.

 

También afirmó que arrojó el arma homicida y la prueba de embarazo a un río cerca de la casa. Aún se busca el celular de la mujer.

 

El crimen ocurrió en Pimenta Bueno. El asesinato conmocionó a los vecinos del municipio, que organizaron un acto el sábado pasado , frente a la comisaría, pidiendo la investigación del caso.

 

“La violencia contra la mujer es perversa, institucionalizada y espantosa”, decía uno de los carteles del manifiesto.

 

El hombre dijo a la Policía que el jueves, víspera del feminicidio, él y Antonieli se vieron en un inmueble que alquilaban para sus reuniones. En el lugar, la víctima le habría mostrado al sospechoso el resultado positivo de embarazo.

 

Masioli le dijo a la policía que se sorprendió cuando ella confirmó su paternidad e incluso sugirió el aborto. La víctima entonces habría declarado que se quedaría con el niño y que no lo ocultaría. La mujer sugirió que se hicieran cargo de la relación y se mudaran a otro lugar.

 

Según el testimonio, Masioli aseguró haberle pedido tiempo a Antonieli para hablar con su esposa y revelarle el embarazo.

 

El sospechoso le dijo a la policía que, después de dormir juntos, tuvo un ataque de ansiedad y le dio a la mujer un "estrangulamiento trasero", inmovilizándola con las piernas. En el comunicado, dijo que “luchó y luchó contra su propia muerte” y que solo detuvo el ahorcamiento “cuando ya no sintió sus propios brazos”.

 

Según el informe, el hombre se desesperó al ver que la mujer aún parpadeaba, “fue a la cocina, tomó un cuchillo grande para carne y se lo clavó una sola vez en el cuello, sacándolo rápidamente”.

 

Después de matar a la mujer, el hombre fue al servicio de la iglesia donde su padre es pastor y luego, según dijo un testigo al informe, se dirigió a una cafetería.

 

El mismo jueves, la madre de Antonieli y dos vecinos acudieron a la casa de la pareja y la encontraron tendida, cubierta de sangre sobre la cama, con las sábanas volteadas y aún con su ropa de trabajo: camisa negra y jeans. También había sangre en el suelo.

 

Un día después del crimen, el Ministerio Público (MP) solicitó la prisión preventiva del técnico informático.

 

Fue localizado en Rolim de Moura y luego conducido a Pimenta Bueno, donde se encuentra recluido.

 

La Fiscalía indicó que espera la conclusión de la investigación policial para analizar las circunstancias del crimen. Además del feminicidio, aún pueden existir otros aspectos del delito, que generan un aumento de la pena, como el hecho de que estaba embarazada y que no tuvo oportunidad de defenderse.

 

El abogado del sospechoso, Sílvio Carlos Cerqueira, dijo al informe que no haría comentarios sobre el caso en este momento.

 

El padre del sospechoso, Júlio César Souza, de 48 años, en un video difundido en una red social, le dijo a la familia de Antonieli que "siente lo sucedido".

 

“No estamos tocando la cabeza de nuestro hijo, no estamos de acuerdo con su actitud, pero yo soy un padre. No contraté a un abogado para sacar a mi hijo de la cárcel, porque reconozco lo que hizo. Contratamos abogados para darle seguimiento, para que pueda ser juzgado conforme a la ley”, añadió.

 

“Analizaremos las pruebas, el testimonio de Gabriel, analizaremos la pericia, los testigos y determinaremos los próximos pasos junto con la Fiscalía”, declaró Débora Cristina Moraes, abogada de la familia de la víctima.

 

Para el abogado, el sospechoso utilizó la crisis de ansiedad como justificación de la muerte y estrategia de defensa. Masioli y Antonieli trabajaron juntos.

 

Según familiares y el abogado, él había llegado recientemente al sector informático, mientras que ella trabajaba desde hacía unos 12 años en la administración de una empresa que entrega internet en Pimenta Bueno.

 

La pareja llevaba diez meses junta. En la familia de Antonieli y en el trabajo, casi todos sabían de la relación.

 

La mujer tenía un hijo, que vive con su abuela y que cumplió tres años el día del entierro.

 

Los tres hermanos y la madre de Antonieli están en estado de shock, dijo su primo Lucas Nunes da Silva.

 

“Están todos conmocionados. Es muy difícil aceptar, creer en esta situación. A cada momento viene el recuerdo de cuánto sufrimiento pasó. La pregunta que no se nos quita de la cabeza es: ¿por qué tanta brutalidad? ¿Qué hace que una persona piense que tiene derecho a quitarle la vida a otra? “Este es otro episodio trágico que, lamentablemente, se suma al de tantas otras mujeres. Y estamos atentos para que este crimen no quede en la impunidad”, informó Márcio Nogueira, presidente de la Asociación de Abogados de Rondônia (OAB/RO).

 

Los familiares de la mujer publicaron una carta pidiendo justicia. “Que este crimen ya no sea un número en las estadísticas, que la partida de Antonieli no sea en vano. Clamamos por Justicia. Queremos una respuesta de la Justicia, que el criminal sea castigado conforme a la ley y que Dios pueda consolar nuestros corazones”.

Brasil
Seguí a Nuevo Diario Web en google news
Comentarios

Te puede interesar

Teclas de acceso