La Alta Comisionada para los Derechos Humanos pide al Reino Unido que reconsidere los cambios propuestos en su política de fronteras, ya que las reformas sugeridas criminalizarían a quienes entren en el país de forma irregular.
El proyecto de ley fue presentado en la Cámara de los Comunes el pasado mes de julio y se envió a la Cámara de los Lores para su aprobación. Pero la Cámara Alta rechazó sus principales disposiciones y, en su lugar, recomendó cambios más acordes con las normas internacionales, precisa la ONU.
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, dijo que el "rotundo rechazo" de los Lores a las disposiciones clave del proyecto de ley debería enviar una señal convincente al Gobierno del Reino Unido de que, en efecto, requiere "modificaciones significativas".
Bachelet añadió que si no se modifican las propuestas actuales, la ley resultante "penalizaría a las personas que entran en el Reino Unido por medios irregulares como si fueran delincuentes".
Esta medida contravendría el derecho y las normas internacionales y separaría a los solicitantes de asilo que llegan al Reino Unido "en dos niveles, violando el derecho de cada persona a una evaluación individual de sus propias necesidades de protección", insistió la Alta Comisionada.