Lo que comenzó como un operativo de rutina terminó en un episodio digno de comedia en la ciudad tailandesa de Chiang Mai, cuando agentes de policía “arrestaron” a un gato extraviado que no cooperaba con las autoridades. El insólito hecho ocurrió el pasado 25 de mayo y, como era de esperarse, las imágenes del “procedimiento felino” se volvieron virales en redes sociales.
Según detallaron los oficiales involucrados, el gato había sido reportado como perdido, y al intentar devolverlo a su dueño, el animal reaccionó de forma inesperadamente agresiva: lanzó mordidas, arañazos y mostró una resistencia digna de cualquier héroe de acción.
Lejos de responder con enojo, los agentes decidieron enfrentar la situación con creatividad y humor. Le tomaron una foto tipo ficha policial (“mugshot”), registraron sus huellitas como si se tratara de huellas dactilares, y hasta le hicieron un test de catnip, que por supuesto, salió negativo.
La parodia policial fue compartida en las redes oficiales de la comisaría, acompañada de una leyenda que decía: “Sospechoso felino detenido por resistencia a la autoridad. No se encontraron sustancias ilegales en su sistema.”
Poco después del divertido incidente, el dueño del gato se presentó a la comisaría y lo llevó de vuelta a casa, aunque ya era tarde para frenar la fama del minino. El “arresto” se había convertido en uno de los contenidos más compartidos del fin de semana en redes sociales de Tailandia, ganándose el corazón de miles de usuarios que celebraron el ingenio de los oficiales.