En un nuevo capítulo de la tensión entre el gobierno nacional y la justicia porteña, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, salió al cruce del juez Roberto Gallardo, quien horas antes le había prohibido al Ejecutivo nacional intervenir con fuerzas federales en el operativo de seguridad de la marcha de la CGT convocada para este miércoles al Congreso.
En declaraciones radiales, Bullrich fue contundente: "Mi respuesta es que él no puede actuar pasando su jurisdicción y decidiendo sobre temas federales, es un juez de la Ciudad. Un juez contravencional de la Ciudad no puede tomar determinaciones de este tipo que involucran a la Ciudad en tanto Capital de todos los argentinos y en tanto asiento del Gobierno nacional".
La ministra recordó que el Ministerio de Seguridad ya había denunciado a Gallardo el lunes, luego de que el magistrado resolviera que la Policía de la Ciudad fuera la única encargada del operativo de seguridad, excluyendo a las fuerzas federales. "Se está extralimitando en lo que él puede decidir", insistió Bullrich.
Pese al fallo judicial adverso, la titular de la cartera de Seguridad ratificó que el gobierno nacional "de ninguna manera" dejará de "cuidar la sede del gobierno federal en la Ciudad como capital de todos los argentinos". "Desde el 10 de diciembre hasta hoy siempre han estado las fuerzas federales y van a seguir estando. Le decimos a Gallardo que no se entrometa porque es trabajar sobre causas que no le competen, no se entrometa a darle órdenes a las fuerzas federales que no están bajo su jurisdicción", sentenció.
Consultada sobre la aplicación del protocolo antipiquetes ante una posible movilización masiva, Bullrich reconoció que "los operativos dependen del tamaño de la marcha". "Si la marcha es más grande hay que ir encausándolos de manera que se ubiquen en las plazas y dejen lo más liberadas posibles las calles. Depende mucho del tamaño de la marcha", admitió.
En la misma línea, el director de Normativa y Enlace Judicial del Ministerio de Seguridad, Fernando Soto, confirmó la implementación del protocolo, afirmando que "no se puede dejar sin seguridad ni dejar de cumplir los objetivos ni misiones que establece la ley". "Lo vamos a realizar como siempre", aseguró en diálogo con otra emisora.
CABA apela el fallo y pide que Bullrich se haga cargo
Por su parte, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a través de la Procuración General, apeló el fallo de Gallardo, calificándolo de "nulo" y solicitando su elevación urgente a la Cámara del fuero en lo Contencioso Administrativo, Tributario y de Relaciones de Consumo para su tratamiento ante la inminencia de la protesta.
El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, también se pronunció sobre la polémica, señalando que "una manifestación es un fenómeno dinámico, imaginar que detrás de un escritorio alguien va a poder escribir que la Policía da cinco pasos y otro tiene que agarrar la situación cuando hay que hacer cumplir la ley, me parece forzado".
Macri, agregó que en materia de seguridad debe analizarse "cómo se va desarrollando la dinámica de la manifestación" y aseguró que "lo que seguro va a pasar es que vamos a garantizar la seguridad en la Ciudad con las fuerzas federales y con las fuerzas de la Ciudad, como siempre". Cabe recordar, que el fallo de Gallardo había dispuesto que el operativo quedara exclusivamente a cargo de la Policía de la Ciudad, permitiendo a las fuerzas federales solo la custodia del Congreso Nacional.
La confrontación entre la justicia porteña y el gobierno nacional por el control del operativo de seguridad de la marcha de la CGT añade un nuevo elemento de tensión en la previa de la protesta, generando incertidumbre sobre cómo se desarrollará la jornada del miércoles.
Con información de El Destape
