El jugador "enmascarado" se trata de un profesional, perteneciente a un equipo de La Liga Española de Fútbol. Según sus dichos, su plantel le prohibió participar en el torneo de aficionados "Fútbol 7" organizado por la Kings League.
Por este motivo el jugador tuvo que presentarse a jugar con una máscara de lucha libre y mangas largas negras (para tapar sus tatuajes) para no ser reconocido y tener sanciones.
Al partido acudieron entre otros presidentes de clubes y representantes importantes como Piqué, Agüero, Casillas, entre otros.