
En Santiago del Estero hubo y existen aún hoy muchos personajes populares. A diario vemos en la zona céntrica, por ejemplo, a "Coo El Guarachero", "Pauliño" y tantos otros.
Algunos otros ya se fueron, pero por una u otra razón, quedaron grabados en el corazón de la gente y en el anecdotario popular.
Entre sus libros inéditos, Omar "Sapo" Estanciero recuerda la historia de "Panchito Poleo", uno de esos personajes populares que pese al paso de los años, los santiagueños no olvidan.
"Panchito Poleo"
Su verdadero nombre era Ramón Francisco Coria Alomo, personaje callejero que vivió en la interseccion de calles Saavedra y Francisco Viano, del barrio 8 de Abril.
A pesar de sufrir alteraciones mentales (pero de características tranquilas), siempre se desenvolvió como un amigo generoso y humilde, ofreciendo los yuyos medicinales a quien los necesitaba.
Recorría kilómetros para juntar las hierbas curativas en su bolsa grande de arpillera.
Por su aspecto, era más bien proletario, desaliñado y desamparado. Calzaba alpargatas de yute deshilachadas por el trajín en el monte. Cabello rubio, despeinado, ojos verdes y su ropa presentaba un aspecto sucio, producto de su deambular por el tupido monte recogiendo los yuyos sanadores que luego vendía en los barrios colindantes al Río Dulce y, algunas veces en el Centro.
Doña Beni, su madre, curvada por el peso de los años, y Juan, su hermano, tenían el mismo corazón bondadoso como Panchito. Gente linda que siempre está en el recuerdo del populoso barrio 8 de Abril."Dame vinooo Mappiii...!", con su bolso al hombro y un pedazo de pan francés en la mano, se paraba frente a la casa de Don Rino Figueroa en la calle 13 del viejo barrio Tala Pozo y le pedía a uno de los integrantes de la familia. Cada vez que recuerdo mi infancia, viene él y se aparece. A pesar del miedo de niño que le teníamos en la cuadra, aún veo el brillo de sus ojos verdes en esa mirada inocente, en su sonrisa cómplice y en su andar cansino por las calles de mi barrio". (Evoca Julio "El Chelco" Rodríguez).
"Yo traigo una chacarera / para un viejo callejero / sírvale un trago i'vino / para Panchito Poleo", reza el estribillo de esta chacarera de Ramón Jiménez y Dante Díaz.
El 28 de agosto de 2005, fallece en calle Independencia prolongación, en el barrio Los Flores, víctima de un accidente automovilístico.
(Del libro inédito "Biografía de folcloristas santiagueños, segunda parte", de Omar "Sapo" Estanciero").