Griselda Sánchez, nacida en San José, Mendoza, se convirtió en un nombre conocido para muchos después de su paso por el reality Gran Hermano en 2007. Como muchos jóvenes del interior del país, llegó a Buenos Aires con el sueño de destacarse en el mundo artístico. Desde pequeña, sabía que quería ser famosa y, al enterarse de que Gran Hermano regresaba a la televisión, no dudó en anotarse. Su participación en la edición de 2007, una de las más exitosas del programa, dejó una marca indeleble en los recuerdos de los argentinos.
Un momento icónico en Gran Hermano
La historia de Griselda en la casa más famosa del país estuvo marcada por uno de los momentos más recordados del reality. En un instante de vulnerabilidad, con lágrimas en los ojos, Griselda expresó: "Estoy hecha concha", luego de la reincorporación de Claudia Ciardone, quien apareció con una renovada imagen, incluyendo extensiones de cabello. Este contraste afectó emocionalmente a Sánchez, quien no dudó en desahogarse frente a las cámaras, dejando en claro lo difícil que estaba siendo su experiencia dentro de la casa, lejos de su hija de tres años y medio. Aunque su paso por Gran Hermano fue breve, con solo 72 días en el reality, le permitió ganar visibilidad y comenzar a instalarse en la televisión.
Antes de entrar al programa, Griselda ya había comenzado su carrera en el mundo del arte, estudiando Arte Dramático en la Facultad de Arte y Diseño de la Universidad Nacional de Cuyo, y participando en obras teatrales independientes. Además, incursionó en el modelaje y fue la cara de diversas campañas publicitarias. Su participación en Casino Conrad, una miniserie erótica de Playboy TV grabada en Punta del Este, también formaba parte de su experiencia en los medios.
Al poco tiempo de su salida del reality, Griselda empezó a participar en eventos y promociones, y fue entonces cuando conoció al fotógrafo José Cicala, con quien comenzó una relación. En una entrevista, Griselda relató cómo se enamoró de él al ver su espalda, y desde ese momento, no se separaron más. Juntos, además, compartieron su pasión por lo audiovisual y trabajaron en la película Lennons, dirigida por Cicala, en la que Griselda también fue protagonista y guionista.
Explorando su identidad y relaciones
A los 29 años, Griselda descubrió una faceta de sí misma que le permitió comprender mejor su identidad: se identificó como biromántica. Al confesarle a su pareja, Cicala, sus sentimientos hacia las mujeres, él respondió con comprensión, lo que fortaleció aún más su relación. Años después, en una entrevista viral, Griselda reveló detalles de su vínculo con su esposo y otras mujeres, mencionando que estuvo en una relación con una mujer durante un año y medio. Sorprendió a todos al compartir cómo su esposo apoyaba esta relación, incluso cuidando a su hija para que ella pudiera salir tranquila con su novia.
No todo fue fácil para Griselda en su carrera mediática. Apenas unos meses después de su salida de Gran Hermano, fue invitada por Telefe a participar de un ciclo conducido por Fabián Gianola, Bien Tarde. Allí vivió una experiencia traumática de acoso por parte del conductor. En una desgarradora entrevista en Intrusos, Griselda relató cómo Gianola la tocaba de manera inapropiada y se comportaba de manera irrespetuosa con ella. Tras ser despedida del programa, Griselda se sumó a otras mujeres que denunciaron públicamente su comportamiento, hasta que finalmente ella misma presentó una denuncia por acoso.
Controversias y peleas mediáticas
Con el regreso de Gran Hermano en una nueva etapa, Griselda retomó su participación en los medios, aprovechando su estilo irreverente para ofrecer comentarios sobre los nuevos participantes. En una de sus intervenciones en Se Picó, generó controversia al criticar a Marcos Ginocchio, ganador de Gran Hermano 2022, acusándolo de ser un "gay tapado". La reacción en las redes sociales fue inmediata y negativa.
Su carrera también estuvo marcada por otros enfrentamientos mediáticos, como una acalorada discusión con Walter 'Alfa' Santiago, quien había realizado comentarios despectivos hacia los habitantes del interior del país. Griselda no dudó en responderle con contundencia, defendiendo a la gente del interior y exigiendo respeto.
Más recientemente, Griselda tuvo una disputa con Catalina Gorostidi, otra ex participante de Gran Hermano, a quien criticó duramente en redes sociales. La situación escaló rápidamente, y Griselda lanzó comentarios hirientes sobre la apariencia de la actriz, lo que generó un repudio generalizado en las plataformas sociales.
La vida de Griselda Sánchez ha estado marcada por momentos de gran visibilidad y controversia. Desde su paso por Gran Hermano, hasta sus experiencias personales y profesionales, ha sido una figura que ha generado tanto admiración como rechazo. A lo largo de los años, ha demostrado ser una persona auténtica, dispuesta a compartir sus luchas, amor y vulnerabilidades con el público, aunque no siempre de la manera más convencional. Su historia es un testimonio de perseverancia, autodescubrimiento y de cómo navegar en el complicado mundo de los medios.