Hoy, 10 de diciembre, es un día relevante para nuestros país y el mundo: se cumplen 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y 40 de democracia ininterrumpida en la Argentina.
Nuevo Diario, a propósito de estas conmemoraciones, se contactó con Taty Almeida, integrante de Madres de Plaza de Mayo - Línea Fundadora: “Tenemos que seguir firmes, defendiendo esta democracia que nos costó tanto conseguir”, indicó.
Taty (de 93 años) aclaró que, en el marco de estas fechas, hay que “estar felices y festejar que podamos seguir en democracia”.
Empero, la referente de Madres se refirió a la asunción de Javier Milei como presidente de la Nación -y su equipo-, que también será hoy: “Lamentablemente, con este nuevo gobierno tenemos que estar bien juntos como nunca porque ya están ensuciando la democracia y la memoria de nuestros hijos. Hay que repetirlo, y ya lo hemos hecho muchas veces: si bien hemos perdido una elección, no nos han vencido; de ninguna manera”.
- ¿De qué manera están “ensuciando la democracia”?
- Diciendo y difamando a esta mujer, la (vicepresidenta electa Victoria) Villarruel... ¡Acá no hubo guerra, acá hubo un genocidio! ¡Y lo niegan! Están queriendo instalar, otra vez, la teoría de los dos demonios, pero acá hay un solo demonio: ¡el que tiró vivas, al mar, a nuestras queridas tres madres, las monjas francesas! ¡Un solo demonio que desapareció a las chicas embarazadas, las torturaron, las mantuvieron vivas hasta tener familia y, después, se apropiaron de sus bebés y a ellas las asesinaron!
La activista por los derechos humanos aseguró que “es muy serio esto que vamos a empezar a vivir a partir del 10 de diciembre”, pero sostuvo que “acá estamos firmes como nunca. A pesar de los bastones y las sillas de ruedas, las locas seguimos de pie, eh, ¡ojo!”.
- Teniendo en cuenta este contexto que vaticina, ¿qué mensaje le dejaría a la sociedad?
- Tienen que defender sus derechos, pero siempre de manera legal; jamás por mano propia. Nosotros no sembramos el odio. Cuando estén caídos, que es natural... un poco tristes, decepcionados por no poder lograr enseguida lo que desean, tienen que decir, bien fuerte: “Si las madres pudieron, ¿por qué no nosotros?”.
Taty destacó el rol de la juventud como el recambio que va a tomar la posta en la lucha por defender los derechos conquistados: “Quedamos muy poquitas madres y abuelas. Las abuelas tienen formado un grupo estupendo con los nietos recuperados, que son los que van a continuar cuando ellas no estén. Nosotras nos damos cuenta de que no toda la juventud estuvo equivocada votándolo a Milei. Nos demuestran en las charlas a las que nos invitan en colegios, universidades o centros vecinales: son todos jóvenes a los que les estamos pasando la posta y que la han recibido y la ponen en práctica”.
La referente, por último, pidió: “A no perder las esperanzas. A estar más juntos que nunca porque acá hay que resistir lo que se nos viene arriba. Repito: ¡nada de odio ni de venganza! De ninguna manera. Se lo hemos demostrado, incluso, a los genocidas cuando le dimos la oportunidad que no le dieron a nuestros hijos. Ni a Alejandro, mi hijo, ni a los 30 mil. Les hemos dado la oportunidad de juicios justos y abogados defensores demostrando que nosotros no sembramos el odio”.