Cada 23 de mayo, Argentina celebra el Día del Cine Nacional en homenaje a un hito histórico: el estreno de La Revolución de Mayo, la primera película argumental del país, proyectada en 1909 en el Teatro Ateneo de Buenos Aires y dirigida por Mario Gallo. Esta fecha no solo recuerda los inicios del cine nacional, sino que invita a reflexionar sobre su evolución y a revivir aquellas películas que marcaron a generaciones enteras.
A lo largo de los años, el cine argentino ha producido obras que emocionan, hacen reír, conmueven y generan conciencia. En esta nota, sin entrar en las grandes peliculas, como "El Secreto de sus Ojos" o "La historia oficial", ganadoras del Oscar, destacamos cuatro películas emblemáticas que forman parte del corazón del cine nacional, de la idiosincrasia argentina y de una generación:
📽 El hijo de la novia (2001)
Dirigida por Juan José Campanella y protagonizada por Ricardo Darín, Héctor Alterio y Norma Aleandro, esta película combina drama, humor y reflexión sobre el paso del tiempo, los vínculos familiares y la búsqueda de sentido en la vida. A través de la historia de Rafael, un hombre atrapado en la rutina y el estrés, la película invita a repensar las prioridades y el valor del amor y la familia. Fue nominada al Oscar como Mejor Película Extranjera y es considerada una de las obras más queridas del cine argentino moderno.
🌆 Un argentino en New York (1998)
Con Guillermo Francella y Natalia Oreiro, esta comedia dramática dirigida por Juan José Jusid cuenta la historia de Franco, un padre tradicional que viaja a Nueva York para reencontrarse con su hija —menor de edad—, quien ha decidido quedarse a vivir allí tras un intercambio escolar. El choque cultural y emocional da lugar a momentos de ternura, humor y reflexión sobre el crecimiento, los sueños y los vínculos entre padres e hijos.
🎭 Esperando la carroza (1985)
Dirigida por Alejandro Doria y con un elenco inolvidable —Luis Brandoni, China Zorrilla, Antonio Gasalla, Betiana Blum, entre otros—, esta comedia negra se transformó en un fenómeno cultural. Basada en una obra de teatro de Jacobo Langsner, retrata con ironía y desparpajo las tensiones familiares y las miserias humanas a través del supuesto fallecimiento de Mamá Cora.
🕯 La noche de los lápices (1986)
Este drama histórico dirigido por Héctor Olivera y basado en hechos reales narra el secuestro y desaparición de un grupo de estudiantes secundarios en La Plata en 1976, durante la dictadura militar. La película se convirtió en un símbolo de la lucha por los derechos humanos y la memoria, al denunciar el terrorismo de Estado y homenajear a las víctimas. Fue fundamental en el proceso de reconstrucción de la verdad en los años posteriores al retorno de la democracia. Los de la generación de los 90' y 2000 la veíamos hasta en la escuela. Conmovedora, esclarecedora, histórica, llegó a penetrar el ingenio colectivo e ingresar en el ranking de las películas argentinas más representativas.
Faltan más, "Un cuento chino", "Historia de un Clan", "El Ángel", "Argentina 1985", "Relatos salvajes", "Nueve reinas", "El robo del siglo", y podríamos estar escribiendo todo el día de lo rico, polifacético y amplio que es nuestro cine, que cada día construye identidad, preserva la memoria y refleja las realidades sociales del país a lo largo del tiempo, y se remarca aún más en gobiernos, como el actual, que buscan interrumpir o menospreciar la labor. Desde los retratos familiares y las crisis existenciales, hasta los dramas políticos más crudos o las comedias más ácidas, el cine argentino ha sabido capturar el alma de su gente.
Por Dalton Sayago
Redacción del Nuevo Diario