Durante la madrugada del sábado, los empleados de un conocido alojamiento transitorio de ciudad Capital quedaron conmocionados tras encontrar el cadáver de un hombre, quien había ingresado solo y había pedido varias bebidas alcohólicas durante la noche.
El macabro hallazgo derivó en la inmediata llegada de la Policía, que trasladó el cadáver hasta la morgue del hospital Independencia bajo instrucción del fiscal que avanza en el caso, Dr. Martín Silva.
En la necropsia se descubrió que, además de las bebidas, también había estado consumiendo sustancias tóxicas, y la combinación de las drogas le provocó un fulminante paro cardíaco que puso punto final a su vida.
Hasta la última hora, el hombre había permanecido como NN, pero su identidad ya se esclareció. Se trata de Emilio Molina, de 36 años. Trabajaba en la localidad de El Deán, y personas cercanas manifestaron que solía estar en situación de calle.