Un sujeto de 23 años y domiciliado en el paraje Puesto de Juanes (Loreto) aplicó una golpiza a su expareja, acusándola de haber inventado un control médico en la Capital para verse con otro hombre, y con un cuchillo amenazó matarla, a la vez de quedarse en la casa para que la víctima no pudiera salir para denunciarlo, a punto tal que la acompañó hasta el baño para impedir que la mujer salga de la casa.
Cuando el sujeto volvió a agredir a la joven —22 años— los hijos de ambos —de 4 años, y de 1 año y 8 meses— salieron de la casa, y el mayor alertó a la abuela que vive cerca, la cual llamó a la Policía.
Cuando los efectivos llegaron al domicilio de la víctima, detectaron que el agresor había huido hacia una zona montuosa, pero poco después lo ubicaron y detuvieron.
Denuncia de la víctima
La víctima se presentó en la Comisaría Nº 7 de la Mujer y la Familia, donde denunció a su expareja, indicando que el sujeto ya había estado detenido antes por agredirla.
Informó que en la tarde del domingo último —a las 17— viajó a la Capital, para poder asistir al otro día —temprano— a un control ginecológico en el hospital Regional, quedando uno de sus hijos con la abuela materna y el otro con el inculpado.
Sostuvo que el lunes 19 —a las 18— regresó a Loreto y su hermano la esperó para llevarla a Totora Pampa, a la casa de la madre. Luego, como su domicilio queda a unos 50 metros fue caminando a su hogar, siendo interceptada por su expareja, quien agarrándola con violencia del cuello la hizo entrar hasta la cocina y le aplicó cachetadas, mientras le hacía escenas de celos, reclamándole haber dejado al hijo menos con su progenitora.
Luego le rompió el pantalón y tras quitárselo lo arrojó al fuego. La joven le pidió que se retire y el sujeto le dijo: “De aquí no me voy hasta que te mate”, y se quedó a dormir impidiendo que ella salga para denunciarlo.
El martes, alrededor de las 8, volvió a golpearla y amenazándola con un cuchillo le pedía que le dijera la verdad sobre lo que hizo en la Capital.