
La tranquilidad rural volvió a verse alterada tras un nuevo hecho de abigeato en el departamento General Taboada. Un productor caprino del Paraje Vinal Esquina denunció la sustracción y posterior faena de cuatro cabrillas preñadas, lo que generó indignación entre los vecinos, quienes aseguran que se trataría de una familia con múltiples antecedentes por delitos similares y casos de maltrato animal.
La denuncia fue radicada en la Comisaría Comunitaria Nº 41 por el señor O. Domínguez, jornalero de 38 años, quien relató que el miércoles por la tarde notó el faltante de sus animales y comenzó la búsqueda en el monte. Allí encontró dos cabrillas sin vida, con signos de degüello. La escena se completó al día siguiente, cuando halló vísceras esparcidas y rastros evidentes de faena en el monte, correspondientes a los otros dos animales. Los caprinos eran de pelaje oscuro, blanco moteado y café claro, y todos se encontraban preñados, lo que agrava aún más el daño causado.
Durante la inspección en el lugar del hallazgo, el denunciante encontró además un botín de trabajo color marrón, talle 42, que fue entregado como evidencia a la policía.
Según la denuncia, Domínguez sospecha de tres vecinos de apellido Ponce, dos de ellos menores de edad y uno mayor, quienes ya habrían sido vinculados en anteriores hechos similares, incluyendo la mutilación de caballos en la misma zona, donde los animales fueron hallados con la lengua cortada. En aquel episodio, el padre de los presuntos autores fue detenido durante unos días, aunque luego recuperó la libertad.
Por disposición del fiscal de turno, Dr. Ezequiel Bustamante, se ordenó la realización de un acta de constatación, la intervención de la Brigada de Investigaciones, y el secuestro de los borceguíes hallados.
El caso genera preocupación en los vecinos del paraje y zonas aledañas, quienes expresaron su malestar por la reiteración de este tipo de delitos en la región.