Romina Luz Soria, una comerciante de 35 años (quien autorizó a este medio a publicar su nombre), radicó denuncia en la Comisaría 4ª en las primeras horas de ayer. Fue luego de un violento episodio ocurrido alrededor de las 23 horas del martes 6 del corriente mes.
El denunciado es un sujeto domiciliado en calle Pedro León Gallo, en el barrio Congreso de la capital santiagueña, donde posee un gimnasio. Fue precisamente allí donde ocurrió el incidente.
De acuerdo con lo que relató Soria en la dependencia policial, recibió una llamada el martes, cerca de las 23:30, de su sobrina —pareja del denunciado—, quien le dijo que su novio la estaba agrediendo físicamente.
De inmediato, la comerciante se dirigió al lugar, pero, al llegar, se encontró con que dos mujeres —una empleada y una clienta— le obstaculizaban el paso. Mientras tanto, los gritos de su sobrina, desde el interior del gimnasio, se oían hasta la puerta. Tras forcejear con las dos mujeres, Soria logró ingresar y llegó a donde estaba su sobrina.
La jovencita le contó que en la puerta del gimnasio, el sujeto la había golpeado y le quitó su celular. La chica agregó que pidió auxilio en la vía pública, pero aseguró que nadie se acercó a ayudarla.
La tía de la víctima le preguntó entonces al novio por qué había actuado de esa manera, y este respondió que le había prestado a su pareja la suma de 200 mil pesos, y como esta no se los devolvía, le quitó y retuvo el teléfono.
Un sujeto presente en el lugar, de apellido Gómez, se ofreció a transferir al denunciado los $200.000, a fin de que este restituya el celular a la joven damnificada. La relación entre esta y el denunciado sería conflictiva desde hace mucho tiempo, pese a lo cual, continúa junto a él.
Por último, Soria relató que el denunciado amenazó con ir a su negocio y destrozarle sus pertenencias, además de insultarla con palabras obscenas.
En virtud de que la joven sobrina de Soria no quiere denunciar al violento, la fiscal de Género, Dra. Andrea Juárez, impuso al denunciado una perimetral con prohibición de acercamiento tanto a su pareja como a la tía de esta.
El relato textual de Romina Soria en Facebook
Vengo aquí en posición de contar mi mala experiencia anoche con un “hombre” donde me tocó ser partícipe de un episodio de violencia de género a una familiar en un gimnasio de calle pedro leon gallo, habiendo muchos testigos de lo que cuento donde sabemos con pruebas de la violencia psicológica, manipulación, discriminación y ahora violencia física que este sujeto ejerce, En este caso hago esto publico porque lamentablemente toda la familia se tuvo que ver involucrada con denuncias de por medio. Yo también en esta oportunidad fui agredida y amenazada por tanto quiero expresar de manera pública por este medio que si algo me pasa a mí o en mi domicilio o trabajo lo hago responsable exclusivamente a esta persona (como expuse anoche en mi denuncia). Mi correspondiente denuncia penal está hecha, actuando por oficio la fiscal Andrea Juárez, confío en la justicia y espero mínimamente una prohibición de acercamiento, ya que esta mañana este personaje nuevamente estaba afuera de mi casa en calle Formosa. Lamentablemente no pueden detenerlo pese a que ya tiene varias denuncias, encima por la misma causa, de distintas mujeres. El sistema no puede hacer mucho si la persona involucrada no hace la denuncia. (No lo hace por las amenazas de el) Ahora mi pregunta es como haces para ayudar a una persona que no se deja ayudar? Cuando se acabaría esto? Cuando la maten de un golpe certero? Que debemos hacer como familia? Y a vos te digo, porque sé que leerás esto, Como ya te dije anoche, sos un impresentable, atrevido, y violento con la anterior, con la actual y con la que venga, porque esa es tu esencia, así sos, espero no me mandes a nadie a ninguna de tus amigas a ninguna de tus cómplices a golpearme como acostumbras a hacer. NADA JUSTIFICA LA VIOLENCIA.