
Con un cuchillo que se apoyaba en el cuello, un sujeto se atrincheró para evitar ser detenido. Estaba ebrio y violó una perimetral para amenazar a su expareja en el barrio La Católica de la Capital. Fue apresado.
Eran aproximadamente las 6.45 de ayer, cuando un ama de casa de 40 años estaba en su vivienda, ubicada en el pasaje Alvear del barrio La Católica, descansando junto a sus hijos. La víctima, hace un par de semanas había denunciado a su expareja de 43 años, residente en Beltrán (departamento Robles) por un hecho de violencia de género. Por orden judicial, el agresor fue excluido del hogar y se le impuso una prohibición de acercamiento e impedimento de contacto a favor de la víctima.
Mientras que la Policía le activó a la mujer el “botón antipánico” en su celular.
Ayer, mientras ella descansaba, el agresor se presentó en su propiedad. Estaba alcoholizado y completamente fuera de sí, porque lo había denunciado. Decidido a “hacer justicia por sus manos”, el sujeto comenzó a amenazar a la víctima. La insultó e intentó agredirla físicamente.
La mujer se defendió y logró tomar su celular para alertar a la Policía de que estaba en peligro. Los efectivos de la Unidad Táctica Motorizada de la División Prevención de la Departamental Nº 16 de Los Flores se hicieron presentes en el lugar. En ese momento el agresor tomó un cuchillo y se lo colocó en el cuello, amenazando con matarse, para evitar ser detenido.
Se realizó una negociación durante unos minutos, por lo que finalmente fue inmovilizado y aprehendido por los “guardianes del orden”. Se determinó que el agresor se encontraba alcoholizado. Se le secuestró el arma blanca.
Fue alojado en sede policial por disposición de la Fiscalía de turno de Capital y se ordenaron medidas a seguir.