Una condena de 10 años de prisión solicitó ayer la Dra. María Emilia Ganem, coordinadora de la Unidad Fiscal de Añatuya (Taboada), que se aplique a un individuo que se domicilia en el barrio Villa Abregú de esa ciudad, por considerarlo culpable de haber violado a dos hijas, ambas menores.
Tal requerimiento se produjo en el transcurso de los alegatos de clausura del juicio que se está sustanciando en contra del inculpado, que es juzgado por el tribunal que integran los Dres. Juan Carlos Storniolo, Julio Carmelo Vidal y Daniela Campos Nittinger.
La representante del Ministerio Público Fiscal acusó al sujeto y requirió condenarlo como autor material del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo en perjuicio de sus hijas de 14 y 16 años.
Planteo de la defensa
Por su parte, la defensora oficial Patricia Betancor —que asistió legalmente al acusado— pidió que su pupilo sea absuelto por existir circunstancias de duda a su favor, y en forma subsidiaria solicitó que se le aplique una condena mínima, pero por el delito de abuso sexual simple.
Algunos pormenores
La causa en contra del sujeto se inició en base a la denuncia que impulsó la madre de las víctimas, en relación a los abusos que habría sufrido la mayor de ellas, en tanto que después de 1 año y 8 meses se denunció lo de la menor, tras ser examinada por un médico forense que detectó lesiones compatibles con abuso.
Cabe señalar que la mayor luego se retractó y afirmó que su padre nunca la había abusado. En cuanto a la menor, nunca dijo que su progenitor la haya abusado, ni aún en la Cámara Gesell.