Franco Rojas es un tatuador de 29 años, de la ciudad de Fernández (Robles). Sufrió una brutal paliza que casi le cuesta la vida. Le quedarán secuelas y debe tener un cuidado extremo. Recibió el alta médica, pero debe seguir con un estricto control médico.
El fin de semana último, Franco se dirigió a un evento que se realizó en la localidad de Buey Muerto, departamento Robles. Se habría producido un problema, que tuvo como protagonistas a Franco y a un sujeto de apellido Concha. Para evitar problemas, Rojas se retiró del evento. Pero en un camino vecinal, en cercanías del canal, habría sido atacado a golpes por Concha y otro sujeto.
De acuerdo con la investigación, los atacantes interceptaron a la víctima y le propinaron una brutal paliza. Rojas —que estaba alcoholizado— quedó desorientado. Intentó salvarse, por lo que ascendió a una de las motos de los agresores y trató de escapar, pero fue interceptado nuevamente. Los denunciados derribaron a Rojas del rodado y, en el suelo, comenzaron a propinarle golpes de puño y puntapiés. Lo dejaron inconsciente.
Luego le sustrajeron una billetera que contenía dinero y documentación, su celular —un iPhone 13 Pro—, las zapatillas y la bermuda que vestía. Rojas fue internado con lesiones en la cabeza y en diversas partes del cuerpo. Pero ayer, recibió el alta médica con cuidados extremos.
Ante la situación, la familia del tatuador emitió un comunicado en las redes sociales: "Primero que nada, agradecemos a todos los que estuvieron y por el apoyo. A Franco le dieron el alta, con todas las precauciones que se tienen que tener después de una situación como esta. Damos gracias a Dios que hoy puede contar esto". Al tiempo, agregó: "Circularon estados en los que usaron una imagen de él para decir que todo fue una exageración; que él está bien. Se ve que no bastó con el daño causado, ¿qué más necesitan ver? Sabemos que están corriendo miles de versiones, que se quieren lavar las manos, pero siguen dejando en evidencia la clase de cobardes que son".
"Franco está vivo gracias a los vecinos que salieron a socorrerlo. Franco no se cayó de la moto. A Franco lo quisieron matar a golpes. No hay justificación para tan aberrante hecho. Vamos a actuar hasta que se esclarezca este lamentable episodio", indicaron los familiares, al tiempo que brindaron las identidades de los agresores y su foto.
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