Una mujer de 32 años, domiciliada en el Bº Rivadavia, quien se dedica a la venta de empanadas, participó con un puesto de comidas con su horno móvil en la feria del parque Aguirre. Tras la finalización del evento, tuvo un problema de salud y días después advirtió que le habían sustraído el horno móvil —que tiene un gancho para ser tirado por un vehículo— del parque Aguirre, donde lo había dejado sin seguridad. Sin embargo, anteayer, mientras circulaba por avenida Colón, advirtió la presencia de un horno móvil de similares características en la vereda de una casa del barrio Primera Junta. La damnificada realizó la denuncia y se investiga el hecho.