
En la jornada de ayer se concretaron dos diligencias importantes en el marco de la causa que investiga las causas de muerte de Luciana Torres, quien fuera hallada sin vida en su departamento colgada de una soga.
Por la mañana se recibió ampliación de indagatoria a la psicóloga Ana Carolina Ruzo, y por la tarde se realizó la pericia psiquiátrica a Joaquín Cesca Castiglione, quien fuera novio de la occisa.
El imputado por instigación al suicidio se presentó ayer a las 16 en el Departamento de Reconocimiento Médico de la Policía provincial, donde los médicos psiquiatras Juan Pablo Velarde y María Eugenia Roldán lo sometieron a la mencionada pericia, cuyo informe será remitido en próximos días a la fiscalía, posiblemente mañana o el lunes venidero, según fuentes consultadas.
Dichos de la psicóloga
En la mañana y asistida por el abogado Juan Ramón Jorge, la Lic. Ruzo amplió indagatoria ante la fiscal Celia Mussi, y por pedido de esta con la presencia de la Dra. María Carolina Salas, jueza de Control y Garantías.
Cabe recordar que se le imputa el delito de omisión de auxilio (Art. 108 del Código Penal).
La profesional sostuvo dos cuestiones relevantes: 1º) No vio a Luciana Torres como una potencial suicida, y 2º) Le recomendó asistir a un psiquiatra y la paciente no aceptó, según relató.
Ruzo informó que tuvo siete sesiones con Luciana Torres, quien canceló la última. En ninguna de ellas detectó comportamientos de una persona que fuera potencial suicida, y fundamentó tal aseveración en el hecho de que la occisa tenía su vida organizada en su día a día, con los hijos y con las relaciones sociales.
Indicó que era una persona que trabajaba (vendía ropa), realizaba viajes con amigos, no detectando en ella una cuestión de emergencia, y remarcó que en ningún momento abandonó a Luciana en su asistencia.