Un sujeto de 18 años y domiciliado en el Bº Gas del Estado de la Capital, terminó entre rejas de una celda luego de que causara quemaduras a su hermana, a la cual le arrojó agua hirviendo, después de que ambos protagonizaran discusiones por la venta de ladrillos que habían sobrado de una construcción.
El hecho ocurrió en horas de la siesta del miércoles último, alrededor de las 14.50, y fue denunciado por la víctima, de 22 años, en la Comisaría Nº 11 de la Mujer y la Familia, desde donde se dio intervención a la Dra. Mariela Judith Díaz, de la Unidad Fiscal de Género y Violencia Intrafamiliar.
La fiscal dispuso que la víctima sea examinada por un médico de Sanidad Policial, y luego de constatadas las lesiones solicitó a la Dra. Cecilia Laportilla —jueza de Género— que ordene la detención del inculpado, la que ya se hizo efectiva.
Los dichos de la víctima
La denunciante indicó que ella y su hermano residen en inmuebles distintos pero en el mismo terreno, el cual le pertenece a su abuela materna. Reveló que alrededor de las 11, su hermano se acercó a su casa y le reclamó por los ladrillos.
Ella le respondió que los había vendido porque no tenía para comer. El sujeto se enojó y arrojó el palo de un escobillón a una ventana y rompió un vidrio. La madre de ambos intervino para hacer cesar el incidente, pero horas después el acusado arrojó cascotes a su casa y volvieron a discutir. Una hermana intercedió para que se calmaran. Luego, la víctima pidió una brasa a su madre para hacer fuego y su hermano agarró la olla con agua hirviendo, arrojándole el líquido que le causó quemaduras en rostro y brazo derecho.