Un empleado de la Universidad Nacional de Santiago del Estero (UNSE) decidió ayer dirigirse a un boliche de calle Independencia del barrio Cabildo, a fin de disfrutar un momento de diversión y esparcimiento. En medio de la música y los tragos, el hombre de 48 años conoció a una joven. Bailaron y hubo algunos arrumacos, ocasión en la que la desconocida sedujo al empleado público nacional. El consumo de bebidas alcohólicas se multiplicó —pagados por el hombre— con el paso de los minutos, hasta que alrededor de las cinco de la mañana, la mujer le dijo que podrían irse a otro lugar más íntimo, sin la mirada de los curiosos. Hasta ese momento, la “alegría” del hombre y los actos de seducción de ella eran el centro de atención del resto de los asistentes. En efecto, el hombre accedió al pedido de la joven, salieron del boliche y ascendieron al auto de él que había quedado estacionado en las inmediaciones. Permanecieron en el lugar unos minutos, hasta que la mujer le pidió que la llevara hasta avenida Colón y Sáenz Peña. Por pedido de la acompañante, el conductor estacionó sobre la última arteria.
La mujer le pidió prestado el celular para realizar una llamada y descendió del rodado. Seguidamente, le dijo al automovilista que la esperara y que regresaría en un momento para seguir viaje hacia donde él quisiera. Caminó por Sáenz Peña y giró por avenida Colón, hasta desaparecer.
El hombre, quien se domicilia en el barrio Cabildo, esperó, pero al cabo de una hora sin que la joven regresara, se desesperó, especialmente porque se había llevado su celular de alto valor económico. Descendió y caminó hasta la intersección de Sáenz Peña y Colón, pero no vio a nadie. En ese momento se convenció de que había sido seducido por la mujer para quedarse con su aparato de telefonía móvil. Sin embargo, no fue lo único que se llevó. Al regresar al auto comprobó que también le había sustraído 350 dólares (equivale a más de 440 mil pesos).
El damnificado realizó la denuncia y el hecho es investigado por Robos y Hurtos de la Comisaría Nº 4, por orden del fiscal Ramón Alfonzo.