Los ojos del mundo se posaron ayer sobre la boxeadora argelina Imane Khelif, quien venció en apenas 46 segundos a la italiana Angela Carini, en el marco de los Juegos Olímpicos de París 2024.
“Me duele muchísimo. Me dio dos golpes y ya no podía respirar. Nunca había sentido un puñetazo como este”, acusó Carini, en conferencia de prensa, tras abandonar la pelea.
Diversas figuras públicas, como el presidente Javier Milei o la escritora J. K. Rowling, sugirieron que Khelif era una mujer trans.
“¿Podría alguna imagen resumir mejor nuestro nuevo movimiento por los derechos de los hombres? La sonrisa de un hombre que sabe que está protegido por un establishment deportivo misógino que disfruta de la angustia de una mujer a la que acaba de golpear en la cabeza y cuya ambición de vida acaba de destrozar”, manifestó la autora de Harry Potter, vía X.
Lo cierto es que Khelif es una mujer cisgénero (asignada como mujer al nacer e identificada como tal). La argelina tiene hiperandrogenismo, una condición endocrinológica que altera sus niveles de testosterona, entre otras cosas. El Comité Olímpico Internacional (COI) le permitió participar en el boxeo femenino.
Luisa Paz, referente nacional transfeminista LGBT+, observó que “de todo lo que ha sucedido, se resalta el odio hacia la comunidad trans” y “el estigma que conlleva a ser una persona trans y no tener la posibilidad de participar ni en Juegos Olímpicos ni en deportes en general”, en diálogo con el equipo de Nuevo Diario.
Paz consideró que este hecho tiene que servir para que los medios de comunicación revisen “realmente cómo viene la mano”. “Lo que han hecho con esa mujer es atroz. La exposición y el alcance que ha tenido para que nuestro presidente se dedique a explicar, desde su visión, que es y que deja de ser, realmente, como sociedad, estamos muy mal si creemos eso”, agregó.
Vale mencionar que en Argelia se criminaliza la homosexualidad o cualquier expresión o identidad de género distinta a la cisheterosexualidad, es decir que sería imposible que el país africano enviara a una mujer trans a representarlo ante el mundo.
“Aquí lo importante es denostar y defenestrar a las personas. Es el juego de pegarle al caído”, ironizó la extitular del Inadi en Santiago del Estero, quien señaló que “la gente no chequea bien la información”.
Paz aseguró que vivimos en tiempos donde “los discursos de odio están cada vez más presentes. Ahí descargan mucho, ahí se nota demasiado el crecimiento del odio hacia la comunidad trans”, lamentó.
Las denuncias de figuras públicas y la respuesta del Comité Olímpico Internacional
El presidente Javier Milei compartió ayer su postura luego de la repercusión que tuvo el triunfo de Imane Khelif.
“A ver boluprogres. Vengan a explicar esto… Cuando se les marca las estupideces con argumentos responden poniendo todo tipo de etiquetas que buscan cancelar el argumento que los rebate. Después aparece la realidad que los expone frente a su imbecilidad. Si seguía la mataba”, expresó el mandatario nacional vía X.
Elon Musk, CEO de Tesla Motors y “compinche” de Milei, suscribió con “absolutamente” al posteo de un usuario que sugirió que “los hombres no pertenecen a los deportes femeninos”.
El boxeador Sergio “Maravilla” Martínez hizo lo propio en redes sociales: “La estupidez e incompetencia humana carece de todo límite. Parece que millones de años de evolución de nada sirven si dudamos que debemos ir al ginecólogo o al andrólogo y nada más. Parece que tenemos que perder vidas de mujeres para reparar algo que ya no tiene arreglo. COI inútiles”.
A pesar de las múltiples quejas, el COI hizo su descargo: “Todos los atletas que participan en el torneo de boxeo de los Juegos Olímpicos París 2024 cumplen con las normas de elegibilidad e ingreso a la competencia, así como con todas las regulaciones médicas aplicables establecidas por la Unidad de Boxeo París 2024”.
Y añadió: “Estas 2 atletas fueron víctimas de una decisión repentina y arbitraria de la IBA (Asociación Internacional de Boxeo). Hacia el final del Campeonato Mundial IBA en 2023 fueron descalificados repentinamente sin ningún debido proceso. La actual agresión contra estos 2 atletas se basa enteramente en esta decisión arbitraria, que se tomó sin ningún procedimiento adecuado, especialmente considerando que estas atletas habían estado compitiendo en competiciones de alto nivel durante muchos años”.
El máximo organismo olímpico, a través del comité creado para regular el boxeo en los Juegos, afirmó que “todos los atletas que participan en el torneo respetan las reglas de elegibilidad e inscripción para la competición”.