
En esta edición de El Multimedio en tu Barrio, la misión de retratar el hogar de los santiagueños nos llevó a un lugar emblemático, conocido durante muchos años como “Las Cejas”. El barrio Mosconi, un ejemplo de unidad, lucha y esfuerzo comunitario, fue el escenario del recorrido de esta semana. El equipo de Nuevo Diario se adentró en este hermoso lugar para conversar con sus habitantes, quienes se mostraron agradecidos por la visita.
La primera parada del recorrido fue la casa de Horacio Agüero, de 91 años, un reconocido cantante que integró el conjunto Los Tobas y que se destacó como instructor de canto de diversos representantes del folclore santiagueño. Don Horacio nos recibió con una calidez que refleja el espíritu del barrio Mosconi. “Pasen, adelante, les doy la bienvenida a ustedes, que vienen del diario, una gesta de don Cantos”, dijo, recordando al fundador del medio.
Este acto, más que un simple evento familiar, es una prueba de que la música no tiene edad en el barrio Mosconi.
Allí nos encontramos también con una de las figuras más entrañables y queridas del barrio Mosconi: Argelia Degani, de 92 años. Conocida como la mujer más longeva del barrio, Argelia compartió con Nuevo Diario su profunda conexión con la comunidad y la bendición que siente al haber vivido y criado a su numerosa familia en este lugar tan especial.
“Tengo más de 15 tataranietos, siete hijos, muchos nietos. El barrio Mosconi es todo para mí, aquí hice mi familia. ¿Qué más se le puede pedir a Dios, que vivir tantos años, y que toda mi familia esté bien? Es una bendición muy grande”, comentó Argelia, visiblemente emocionada. Sus palabras reflejan una vida llena de amor, esfuerzo y gratitud.
Bailarín de los montes
Comentó sobre su barrio: “Yo nací en ‘Las Cejas’, así se llamaba antes, dos casitas antes del canal. Para mí, el barrio es donde se inició mi viaje. Sin agua, sin luz, así fue el inicio de los vecinos, un respeto total. Es un barrio de vidaleros. Aquí empecé a bailar y a vender chipacos, moroncitos y pan caseros, así empecé a trabajar. Para nosotros, pertenecer a este barrio es un honor”.
Su centro vecinal
A pesar de varios años descuidado, el centro vecinal del barrio, que tuvo mejores años, se encuentra en estado de deterioro, sin embargo, los vecinos tomaron la iniciativa de ponerlo en funcionamiento, ayer los vecinos realizaron diferentes actividades que incluyeron visita de autoridades gubernamentales y vecinos de diferentes puntos del barrio Mosconi.
“Nuestro objetivo siempre fue brindar pan y trabajo en el barrio”
Trayectoria
“Siempre vendimos así, para la gente, no importa si no ganamos mucho, lo que siempre nos importó fue darle trabajo y pan a la gente”, comentó don “Lucho”, el patriarca de la familia y administrador del local. Don “Lucho” dirige la panadería junto a su hijo y su nieta, quienes continúan con la tradición familiar. Este enfoque en el bienestar de la comunidad ha convertido a la panadería Morales en un lugar querido y respetado por los vecinos del barrio Mosconi. En un contexto económico marcado por el ajuste y la inflación impuesta por las políticas del Gobierno nacional, la panadería Morales se destaca por mantener precios accesibles y que parecen de otro país. El kilo de pan cuesta $ 1.000 y la docena de facturas $ 2.500, precios que son una muestra del compromiso de la familia Morales con su comunidad. “Es un honor trabajar en este barrio”, comentaron a Nuevo Diario, subrayando la importancia de mantener sus productos al alcance de todos Otro aspecto que hace única a la panadería Morales es su método de producción. Es una de las últimas panaderías a leña de la ciudad, una tradición que han mantenido a lo largo de los años. Este método no solo preserva un sabor y una calidad distintivos, sino también conecta la panadería con sus raíces y con una forma de hacer pan que se ha perdido en gran parte del mundo moderno.
El 50º aniversario de la panadería Morales no solo celebra la longevidad del negocio, sino también su papel fundamental en la comunidad. A lo largo de los años, la panadería ha sido más que un lugar para comprar pan; ha sido un espacio de encuentro y de apoyo mutuo. La familia Morales ha proporcionado empleo y sustento a muchos en el barrio, convirtiéndose en una parte esencial de la vida diaria en el barrio Mosconi.
“La casta habíamos sido nosotros, Milei no entiende el hambre”
Por último, los vecinos comentaron sobre la inseguridad, una casa usurpada y la falta de luminaria en las calles.
El club Pablo VI sigue adelante, pese al difícil momento
El presidente Claudio Acosta dialogó con el Multimedio en la visita al barrio.
Nuevo Diario en los Barrios sorprendió ayer a Claudio Acosta, presidente del club Pablo VI, ubicado en el corazón del barrio Mosconi (ex-Las Cejas).
“La verdad que es una grata sorpresa recibir la visita del Multimedio Nuevo Diario-LV11 ‘La Radio de los Santiagueños’”, expresó el titular del club Pablo VI.
Sobre la situación institucional, comentó: “Estamos trabajando como siempre, pero ahora es más complicado. La situación económica del país nos afecta a todos. La realidad me dice que el presidente Milei desconoce totalmente la vida de las entidades barriales, deportivas y sociales. En diciembre pagamos $ 3.700 de luz, ahora pagamos unos $ 253 mil pesos. Nos están matando”.
Más adelante indicó: “Tenemos confianza en nuestro gobernador Gerardo Zamora, ya que siempre nos dio una mano. Está proyectada la construcción de una cancha techada de básquetbol y un salón para fiestas, pero se frenó todo por la misma situación que es de público conocimiento. Tenemos fe de que vamos a llegar a ese objetivo con el apoyo de la Provincia”.
La entidad cuenta con cancha de fútbol, además de F-7 (ambos sexos), escuela de boxeo y fútbol infantil. También están construyendo el tapiado perimetral de la calle Nuestra Señora del Carmen.
Además, cuenta con sanitarios y cocina, entre otras comodidades. Sábados y domingos se juegan las rondas barriales.