En una nueva entrega del ciclo “Actualidad Política”, que se emite de lunes a viernes al mediodía por Radio LV11, estuvo como invitado especial el Ing. Héctor Daniel Farias. El docente e investigador habló y analizó la situación de la sedimentación del embalse del Río Hondo y su vita útil. El mismo es docente y fue seleccionado hace poco como experto de la Unesco.
Durante el IV Congreso Iberoamericano sobre Sedimentos y Ecología, realizado en Costa Rica, recibió un reconocimiento por su reciente nombramiento e incorporación por parte de la Unesco, como experto asociado por Argentina al Programa Hidrológico Internacional, iniciativa Internacional de Sedimentos. Donde expuso dos proyectos de investigación, que se llevan adelante a través del Instituto de Recursos Hídricos de la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnológicas, y además participó de importantes reuniones para publicaciones internacionales y tuvo la posibilidad de realizar visitas a campo.
Acerca de su participación en aquel Congreso, dijo: “Lo que me tocó presentar tuvo que ver con los resultados de una serie de proyectos de investigación que tenemos en curso, en el ámbito del Instituto de Recursos Hídricos. Tenemos una línea de investigación establecida hace varias décadas, donde estudiamos procesos de transporte de sedimentos vinculado a cuerpos de agua como embalses, reservorios, lagos lagunas, y la actividad de los sedimentos en los ríos y su interacción con las obras de infraestructura a través de la actividad humana en general. Nosotros venimos desarrollando esa línea de mediados de la década del 80´ hasta la actualidad, con múltiples publicaciones y proyectos, con la idea de formar docentes, investigadores y con la finalidad de entregar los resultados para optimizar el proyecto de obras y actividades que se desarrollan en ámbito fluviales”.
Trabajo interrelacionado
Acerca de un trabajo interinstitucional que se plantea en este proceso de apropiación de investigaciones, explicó: “Tenemos un convenio marco de fortalecimiento interinstitucional y de optimización de capacidades técnicas recíprocas, en las cuales se desarrollan una serie de acuerdos específicos, cada vez que la provincia tiene la necesidad de trabajar en proyectos de investigaciones especializados, en los cuales nosotros podamos aportar el conocimiento, siempre estamos en interacción con las diferentes áreas y organismos que tienen que ver con el manejo, gestión y preservación de los recursos hídricos a nivel provincial, tanto superficiales ecomo subterráneos”.
“Esto nos lleva a estar permanentemente en contacto con las personas que trabajan en algunas de estas áreas que siguen un proceso. Lo que nos permite estar en comunicación permanente”, planteó.
Avances
“Hay otro instituto dentro de la Unse, que depende directamente del rectorado que es el Instituto de Estudios Ambientales y Desarrollo Rural de la llanura chaqueña. Donde tenemos especialistas desde este instituto, trabajando en proyectos de captación y almacenamiento de aguas meteóricas. Todo el NOA en general y nuestra región de Santiago del Estero, en particular, es una zona que desde el punto de vista hidrológico representa un comportamiento muy singular, porque es caracterizado por una hidrología de marcado régimen estacional. En Santiago llueve poco, porque la lluvia se concentra especialmente en cuatro a cinco meses, en la temporada estival. Y después hay un período prolongado que justamente ahora estamos en su fase final, de abril a noviembre, donde prácticamente no llueve una gota”.
A su vez, sostuvo: “Hemos desarrollado un proyecto que se debe a recurrir a elementos tecnológicos de fácil construcción para captar el agua en abundancia, para utilizarla en época de déficit. Este recurso plantea una alternativa interesante”.
Sedimentación
En otro tramo de la entrevista, destacó: “Todos los embalses del mundo están condenados a ser sepultados por los sedimentos. El tema es de qué manera se convive con esta situación. En el caso particular de Termas de Río Hondo, pasó que durante un período muy importante después de la construcción, hubo un significativo cambio de uso de suelo. Entonces, hubo un período donde el aporte fue significativamente alto, eso es como que se ha estabilizado, pero a la larga el embalse se va a colmatar”.
“Cuando se empieza a llenar de sedimentos, bajan los niveles de garantía que tiene el embalse para poder satisfacer los objetivos con los cuales ha sido diseñado. La vida útil está en la fase de pérdida. Hay que trabajar en el ritmo de colmatación; Se puede ralentizar el nivel de tasa de colmatación”, planteó.
“Hemos hecho modelos de simulación, lo que permite simular escenarios. Los escenarios más desfavorables nos sitúan entre los años 2055 y 2060. Dentro de 30 o 40 años, donde el embalse llegaría a una colmatación del 50% de su capacidad inicial”e, añadió. Para entender, colmatación, significa rellenar una hondonada o depresión del terreno mediante sedimentación de materiales transportados por el agua.