En el inicio del Triduo en honor a Nuestra Señora de la Dulce Espera, se llevó a cabo ayer la reentronización de su imagen en las instalaciones del CIS Banda con una misa especial oficiada por el padre Gastón Cuello.

“María nos trae ternura, como toda mujer tiene algo que aportar adonde está y ella aportó lo más importante, ser madre, acompañemos para que esa vida sea plena. En este país se define la Ley de Aborto, pero si nosotros seguimos el mandamiento de Dios no podemos apoyar una ley que va en contra de la vida”, dijo en su homilía.

Finalmente expresó: “Pidamos a la Virgen para que interceda para que seamos hijos de Dios, amigos y si fallamos que podamos volver a empezar, porque Dios siempre nos da oportunidades y jamás abandona su creación. Madre ayúdanos a vivir siempre en el amor que tu hijo Jesús nos ha enseñado”.

Antes de concluir la misa, el padre impartió la bendición a los enfermeros en su día, destacando su importante labor.

Lo mismo hizo con las mujeres embarazadas pidiendo por la vida en gestación.

Luego se trasladó la imagen de la virgen a su nuevo lugar en el Centro Integral de Salud Banda.

Las actividades continuarán hoy donde se meditará en torno a “Amor eterno para mí”, y mañana se meditará sobre “Jesús murió y resucitó por mí”, en el marco del Triduo.