Luego de las subas que acompañaron el inicio de febrero, uno de los sectores que estaría en el foco es el de la industria panaderil. Puesto que es muy común y ya un dicho popular que “si aumenta el pan, aumenta todo”, lo que hace referencia a que dicho rubro está muy ligado con varios sectores que a medida que sufren una actualización de precios, afecta a su producción también. Ya que de la producción de panificados, se relaciona con el transporte, con la materia prima, con los impuestos de servicios como energía eléctrica, gas y demás.
Frente a esto, el rubro enfrenta uno de los veranos más fuertes que Santiago del Estero haya tenido, ya que de una semana para aquí, los días vienen dando registros de altas temperaturas. Y eso es un condicionante negativo a la hora del consumo de pan, panificados y productos de pastelería.
En diálogo con Roberto Llanos, del sector de Industriales Panaderos de Santiago del Estero, expresó: “No se ha activado nada, siguen aumentando los servicios, los impuestos, la luz, el agua y también la materia prima. El consumo ha bajado considerablemente, más allá de que la compra del pan nunca escasea, ya que la gente siempre compra algo de pan, facturas o una medialuna. Pero no son compras considerables y eso es lo que preocupa”.
“Han bajado las ventas y mucho más en estos meses, donde ha comenzado el descenso en diciembre, enero por lo bajo y ahora en febrero, no tenemos una buena proyección, teniendo en cuenta el calor, que es un factor negativo. Nosotros hemos cerrado el 2024 con una baja del consumo de entre un 30% y 40%, y se ha mantenido estas semanas”, planteó Llanos.
A su vez, reiteró que hay colegas empresarios y comerciantes del rubro han tenido que bajar la producción y reducir las horas de trabajo de sus empleados, llegando a hacer media jornada. “Es muy lamentable la situación. Nosotros, a diferencia del resto del país, hemos mantenido el precio”, dijo, ya que actualmente el kilogramo de pan surtido está entre $2.400 y $2.500 como precio de referencia pero hay algunos locales que lo tienen a menos. “En realidad, hoy como está la situación, el precio debería ser de $2.800”, agregó.