La agencia de la ONU para los refugiados palestinos, la UNRWA, está a punto de colapsar financieramente amenazando con un “desastre humanitario”, advirtió su comisionado general en una conferencia para recaudar fondos.
Philippe Lazzarini aseguró que su agencia se enfrenta a “amenazas financieras y políticas de carácter verdaderamente existencial”. “El apoyo político casi unánime al mandato de la UNRWA no se traduce en un apoyo financiero equivalente”, sostuvo en la conferencia ministerial organizada por Jordania y Reino Unido
Los recursos de la agencia se han estancado desde 2013, mientras las necesidades de los palestinos siguen creciendo.
“Estas crisis están alimentando un profundo sentimiento de abandono por parte de la comunidad internacional. La desesperación y la ira bullen en los campos”, sostuvo.
Lazzarini no sabe si recibirá suficiente financiación para mantener todos sus servicios en funcionamiento en noviembre y diciembre, lo que tendría un “impacto dramático” en los refugiados.
Más de dos millones de palestinos se quedarán sin asistencia alimentaria y monetaria. Más de medio millón de niñas y niños perderán su derecho a la educación. El despliegue de la vacuna del COVID-19 y la atención materno-infantil se detendrán.
La UNRWA tiene un presupuesto anual de alrededor de 800 millones de dólares. Necesitan 60 millones más para 2021. En la conferencia, ocho Estados miembros anunciaron un total de más de 614 millones de dólares en acuerdos de dos a cinco años.
