Un terrible hecho sucedió en Bridgend, Gales del Sur (Reino Unido) cuando una mujer de 32 años ahogó a su hijo de dos en la bañera de su casa y se justificó diciendo que el pequeño “estaba poseído por demonios”.
La mujer que ahogó a su hijo era una fiel creyente de la religión católica, según informó Daily Mail. Los hechos ocurrieron el pasado mes de agosto en Reino Unido. Según explicaron fuentes policiales, la joven, que se desconoce su nombre, estaba jugando con el pequeño en su casa, cuando lo sumergió bajo el agua mientras este tomaba un baño. Luego de su accionar, bajó las escaleras y le dijo a su madre -abuela del pequeño-: “Será mejor que subas”.
De todas maneras, la mujer negó haber asesinado a su hijo de dos años ante el juez, pero admitió un “homicidio involuntario por responsabilidad disminuida” luego de que dos psiquiatras forenses verificasen que tenía una enfermedad mental cuando ahogó al menor. En tanto, la madre confesó a uno de los efectivos el mismo día que ocurrió el terrible hecho que “necesitaba protegerlo enviándolo al cielo”
El fiscal Michael Jones QC afirmó que la madre del pequeño se había comportado de “manera extraña” en los días previos a la muerte de su hijo. Sin embargo, la familia de la joven la describió como una “madre devota”, que nunca se separaba del nene aunque los días previos al asesinato, había tenido un comportamiento dudoso. Había estado “viendo luces” y afirmaba que “los demonios son oscuros y reales”, afirmó la abuela, según publica Radio Mitre.
Además, la noche anterior a la muerte del niño, la acusada asistió a un campamento con su iglesia en New Quay, al oeste de Gales. Luego, la mujer pidió que la bautizaran cuanto antes y habló a sus amigos de que tenía que “hacer un sacrificio”. Tras la muerte de su hijo, lo único que alcanzó a decir fue “lo hice”.
