Ingredientes (12 churros)
- 1 taza de agua
- 1 taza de harina
- 1 pizca de sal
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Aceite vegetal para freir
- Azúcar blanquilla para espolvorear
Materiales extra
- 1 manga pastelera o en su defecto, una bolsa de plástico
- 1 boquilla rizada
- 1 trozo de papel sufurizado o de horno
Preparación
1. Calentar el agua con el aceite de oliva y dejar que hierva.
2. Poner en un bol la harina y agregar la pizca de sal. Añadir el agua hirviendo y remover con una chuchara de madera hasta que se desprenda del bol. Tiene que quedar una masa blandita (como una crema pastelera muy espesa).
- En caso de que se quede muy dura la masa, añade un poco más de agua.
- En caso de que se quede muy blanda la masa, puedes añadir un poco más de harina.
3. Introducir la masa en una manga pastelera provista de una boquilla rizada o de estrella. Tener precaución ya que la masa puede estar muy caliente todavía. Hay que hacerlo en caliente porque al enfriarse, la masa se va a endurecer y dificultará su manipulación.
4. Colocar un trozo de papel de horno sobre la mesa, y sobre él se deben formar los churros en forma de lazo. El papel es para evitar que los churros se peguen a la mesa. Mientras que lo haces, calentar el aceite vegetal en una sartén.
5. Cuando el aceite esté bien caliente (fuego medio-alto), freir los churros, pero hacelo en pequeñas tandas para que no se peguen. Los churros tienen que quedar totalmente dorados. Retirar a un plato con papel absorbente.
6. Espolvoreamos con azúcar por encima.