En octubre de 2003, lo que debía ser una luna de miel soñada para Tina Watson se transformó en una tragedia que capturó la atención de todo el mundo. Es que la joven de 26 años murió mientras buceaba en la Gran Barrera de Coral, en Australia.
Si bien en un principio se creyó que había sido un terrible accidente —que ocurrió a 11 días de su casamiento— cinco años más tarde detuvieron a su exmarido, Gabe Watson, y se lo señaló como sospechoso en el caso. Los investigadores apuntaron contra él, ya que creían que la había asesinado para cobrar un seguro de vida.
Esta detención desató una serie de investigaciones y procesos judiciales que, hasta el día de hoy, generan dudas y controversia en la sociedad.
Una luna de miel trágica
Christina Watson nació el 13 de febrero de 1977 en Alemania, aunque fue criada en el estado de Alabama, en Estados Unidos. En su juventud, conoció a Gabe Watson, a quien consideró el amor de su vida. Se casaron el 11 de octubre de 2003.
Ambos compartían el interés por el buceo, por eso eligieron viajar a un lugar en el cual pudieran practicarlo. Si bien Tina todavía no era una experta, había sacado su licencia poco antes del casamiento. Gabe, por su parte, estaba certificado como buceador de rescate.
Finalmente, la pareja se decidió por Australia como destino para su luna de miel, ya que se enamoraron de la majestuosidad de la Gran Barrera de Coral, un lugar paradisíaco.
La estadía en el lugar transcurría tal y como lo había planeado el reciente matrimonio, pero todo cambió el 22 de octubre cuando ocurrió el terrible accidente en el que Tina perdió la vida.
De acuerdo al testimonio que dio Gabe, ambos se dirigieron a una zona de arrecifes para bucear, pero alrededor de las 10:30 de la mañana, comenzaron a circular corrientes más fuertes de lo esperado.
En ese momento dijo que Tina intentó volver a la costa, pero que, durante ese trayecto, ella le golpeó la máscara y se la desacomodó, lo cual hizo que perdiera la visión por unos instantes. Supuestamente, el joven vio que su esposa se hundía y, a pesar de que intentó alcanzarla, no lo logró. Por este motivo, decidió subir a la superficie para buscar ayuda.
A pesar de ello, otros buceadores que estuvieron presentes en la zona dieron relatos distintos, lo cual generó sospechas en los investigadores. Algunos testigos afirmaron haber visto a Gabe abrazando a Tina mientras ella parecía agitarse, antes de que él ascendiera y ella se perdiera en el fondo del mar. Incluso, una persona que nadaba en el mismo arrecife sacó una foto en la que capturó a Tina flotando, imagen que se descubrió semanas después al revelar las fotos.
Tras la llegada de las autoridades, el cuerpo de la joven de 26 años fue rescatado del agua y trasladado a una morgue. La autopsia, realizada al día siguiente, determinó que la causa de la muerte fue por ahogamiento. Sin embargo, las declaraciones de Gabe fueron inconsistentes y las pruebas que se recolectaron a lo largo de la investigación levantaron sospechas.
En cuanto la fiscalía avanzó en el expediente, se acusó a Watson de homicidio, pero él ya había vuelto a Estados Unidos y no se presentó al juicio en Australia hasta 2008.
Durante las audiencias, se señaló que, a pesar de su certificación, Gabe no realizó maniobras básicas de rescate, como inflar el salvavidas de Tina o sacarle el cinturón de pesas. Además, no compartió su fuente de oxígeno adicional con ella, una práctica común en situaciones de emergencia.
Otro punto de controversia surgió cuando se supo que Gabe le había pedido a Tina, antes del casamiento, que aumentara su póliza de seguro de vida y lo nombrara como único beneficiario. Si bien finalmente no se concretó este cambio, esto alimentó las especulaciones sobre un posible móvil detrás del crimen.
En 2009, Gabe Watson se declaró culpable de homicidio involuntario ante el juez David Glascow y admitió que no cumplió con su deber de asistir a su esposa durante el incidente. Por este motivo, fue sentenciado a cuatro años y medio de prisión, con suspensión de la pena después de 12 meses. Esta condena fue criticada por la familia de Tina y por la opinión pública.
Tras cumplir 18 meses de su sentencia en una cárcel australiana y ser deportado a Estados Unidos en 2010, las autoridades de Alabama lo acusaron de asesinato con el argumento de que había planeado la muerte de Tina desde su país natal.
Sin embargo, en 2012, el juez Tommy Nail desestimó el caso por falta de pruebas concluyentes, ya que sostuvo que la evidencia presentada era insuficiente para demostrar un móvil económico o premeditación.
Después de la muerte de Tina, se realizaron informes sobre comportamientos cuestionables por parte de Gabe: la policía lo captó en video retirando flores y recuerdos de la tumba de su exmujer. Sobre esto, Watson justificó estas acciones al decir que los arreglos eran “grandes y llamativos”. A su vez, trasladó los restos a una nueva parcela sin informárselo a su familia, lo cual también provocó tensión con sus allegados.
Fuente: TN
