En un giro digno de la mejor tragicomedia judicial, la Justicia ha tenido meterse en el fuego una vez más. En esta ocasión, el protagonista del embrollo es nuevamente el Gobierno de Javier Milei, enredado en un amparo colectivo por la no entrega de más de 5 millones de kilos de alimentos destinados a comedores y merenderos, porque la casta, señoras y señores, según el criterio del Gobierno Nacional, son los cientos y miles de personas que acuden a los comedores, y que encima se vieron doblemente afectados por el ajuste estrepitoso promovido por el Ministro de Economía "Toto" Caputo.
El juez en lo contencioso administrativo federal, Walter Lara Correa, ha tenido que calzarse los zapatos del sentido común y abrir este amparo, que viene acompañado de la Unión de Trabajadoras y Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Juan Grabois y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS). Todos unidos por una causa común: el hambre no espera, pero parece que sí los kilos de alimentos que deberían estar en los comedores.
Según las cifras oficiales, los depósitos del Gobierno nacional están abarrotados de alimentos sin repartir, desde yerba mate hasta garbanzos, pasando por puré de tomate y hasta locro. ¿Acaso están esperando a que los alimentos bailen la conga solos hasta los comedores?
Este enredo judicial busca asegurar que los alimentos lleguen a quienes realmente los necesitan, pero la realidad es que mientras tanto, estos productos parecen estar disfrutando de unas vacaciones prolongadas en los depósitos del Estado. ¡Quizás estén esperando que se echen a perder!
En fin, mientras el circo político siga funcionando para resolver problemas que deberían tener solución desde el primer momento, seguiremos siendo espectadores de esta tragicomedia argentina, donde el hambre es la protagonista que espera, y espera, y espera...
DS
